Parque monumental

El festival de Pedralbes causó 51.000 euros en destrozos en unos jardines protegidos de BCN

El ayuntamiento identificó decenas de desperfectos tras las últimas cinco ediciones en el recinto catalogado con la máxima protección patrimonial

El deterioro de los Jardines de Pedralbes

El deterioro de los Jardines de Pedralbes / JORDI OTIX

Jordi Ribalaygue

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Los Jardines de Pedralbes son un escenario codiciado de Barcelona. Un pulso inédito se ha dirimido sobre el espacio monumental a cuenta del próximo Festival Jardins de Pedralbes, el ciclo musical que, por primera vez desde 2013, no organizará la productora Concert Studio, sino una de sus rivales, Clipper’s Live. La pugna por la organización que la Generalitat sometió a subasta y el desquite con el que la creadora del certamen se ha destapado esta semana, al anunciar una réplica de los conciertos de Pedralbes en el Poble Espanyol, han eclipsado el resquemor que algunos vecinos de Les Corts manifiestan con la cita veraniega. Se debe a la creciente afluencia de público, que asocian con el deterioro de algunos rincones del parque, de preservación obligada al ser clasificado con el nivel máximo de protección patrimonial. 

Las reservas que expresan no son caprichosas a juzgar por los daños en el recinto, cuantificados en más de 51.000 euros durante las últimas cinco ediciones. La cuantía aglutina los gastos de las reparaciones tras los festivales de 2018 a 2022. El grueso correspondió a tareas de jardinería, informa el Ayuntamiento de Barcelona, propietario del Palacio de Pedralbes y sus jardines hasta que culminó la cesión de la titularidad a la Generalitat el año pasado. En respuesta una petición de acceso a información pública de EL PERIÓDICO, el Instituto Municipal de Parques y Jardines cifra por decenas los desperfectos detectados tras los espectáculos del último quinquenio, que pasaron de congregar a algo menos de 60.000 espectadores en 2018 a rozar los 100.000 asistentes en las dos últimas ocasiones. 

La factura total ascendió a 51.218,85 euros para subsanar los destrozos, que se incrementaron año tras año: el certamen de 2018 se cerró con 13 “incidencias” -según la terminología que el consistorio emplea-, subieron a 20 en 2019 y escalaron a 30 en 2020. Las cifras aún son más abultadas en las dos últimas ediciones, en que el ayuntamiento afirma que efectuó un cómputo “más exhaustivo” de las anomalías, de tal modo que documentó 122 en 2021 y 95 en 2022.

Flora maltrecha

Un balance detallado de 2021 firmado por el ayuntamiento desmenuza los estropicios en instalaciones de riego, árboles y parterres. Alude a varias arquetas y aspersores fracturados, un banco roto, un escalón de mármol quebrado, una farola derribada y vertidos de basura y mobiliario sin retirar. También refiere vehículos y camiones estacionados indebidamente sobre el césped.

A su vez, menciona distintas clases de plantas maltrechas durante los conciertos de 2021, como mahonias, abelias, agapanthus y capas de hiedra. También notifica una esparraguera "seca por falta de luz y riego", pistacias "muertas por falta de riego", una encina "herida por un vehículo" y ramas rotas del "primer ciprés centenario" del jardín.   

Un parterre sin apenas césped en los jardines del palacio de Pedralbes, en Barcelona.

Un parterre sin apenas césped en los jardines del palacio de Pedralbes, en Barcelona. / JORDI OTIX

Coste menguante

Pese a que cada año se registraron más estragos que en el anterior, el coste para restañarlos fue decayendo. Casi la mitad atañe a 2018, en que se desembolsaron 25.008,96 euros. En 2019, el importe se redujo a 15.516,83 euros, mientras que 2020 se saldó con arreglos valorados en 2.916,13 euros, 6.034,26 euros en 2021 y 1.742,67 euros en 2022. Parques y Jardines indica que todos los importes fueron a cargo de Concert Studio.  

Para explotar el certamen, la promotora tuvo que depositar unas garantías. El año pasado ascendieron una a 15.894,34 euros por la ocupación del recinto y otra a 31.788,68 euros para compensar eventuales desarreglos en la vegetación y el mobiliario. El ayuntamiento aclara que no fue necesario retener parte del depósito en la última edición ni tampoco en las cuatro anteriores, “ya que Concert Studio pagó todos los daños o repuso los elementos deteriorados”, precisa.

El ayuntamiento avanzó parte de las reparaciones y, tras tasar el precio, remitió la cuenta a la empresa. Al respecto, Parques y Jardines contesta que Concert Studio ha liquidado toda la deuda por los desperfectos en los Jardines de Pedralbes excepto la cantidad correspondiente a 2022, que constaba pendiente de cobro el pasado 23 de marzo.

La Generalitat y el ayuntamiento admitieron el año pasado que la ampliación de aforo que se permitió entonces a 16 de los 33 conciertos del certamen comportaba "mayor presión sobre unos jardines catalogados y frágiles". En todo caso, el Govern ha descartado reclamar una garantía para indemnizar eventuales perjuicios para la primera vez que se encarga de conceder el evento. En cambio, ha recortado el lapso de más de tres meses que el parque permaneció en parte ocupado por el ciclo musical el verano pasado a 45 días como máximo el próximo, tanto para levantar y retirar los escenarios como para programar las actuaciones.

La Generalitat fijó de partida en el concurso que el concesionario abonara al menos 3.393 euros por día de estancia en los jardines, catalogados con el mayor blindaje posible. El ayuntamiento recaudó en 2022 por primera vez un canon al organizador, de 850 euros al día. Es menos que los 3.790 euros diarios que las ordenanzas fiscales establecen que debían sufragarse. No obstante, el consistorio otorgó una rebaja, basándose en que la actividad efectiva del festival se limitaba a las cinco horas en que el acceso al parque quedaba restringido por los espectáculos en cartel. Además, se eximió de recargo al promotor durante las semanas de montaje y desmontaje.

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