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El nuevo ocio de Barcelona: experiencias inmersivas

Carnaza fresca para Instagram y TikTok: acaba de abrir Ikono, un paraíso futurista con efecto “¡oooooh!”, y el primer museo de las paradojas de España: Paradox Museum. Es el ocio que se lleva ahora: experiencias en las que posturear. En Barcelona hay estas 6

Ikono, la nueva experiencia inmersiva de Barcelona

Ikono, la nueva experiencia inmersiva de Barcelona / ELISENDA PONS

Ana Sánchez

Ana Sánchez

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Jurarás que te has teletransportado de golpe a alguno de los locos universos de la oscarizada ‘Todo a la vez en todas partes’. Vas caminando por una calle que parece sacada de ‘Blade runner’ entre rótulos asiáticos y flases futuristas. “Barcelona 2090”, informa un cartel. Por si te quedan dudas, aparece de la nada un perro robot haciendo monerías con el deje profesional de Lassie. Estarás al menos una hora más desubicado que al ver el final de ‘Los Serrano’. 

Laberinto de hojas de metacrilato inspiradas en Botticelli de Ikono.

El laberinto de hojas de metacrilato inspiradas en Botticelli del nuevo espacio inmersivo Ikono. / ELISENDA PONS

Carnaza fresca para Instagram y TikTok. Hoy abren dos nuevos destinos de peregrinaje selfie. Ikono, un paraíso futurista con efecto “¡oooooh!”, y el primer museo de las paradojas de España: Paradox Museum. Son las dos palabras mágicas del ocio de ahora: “Experiencias inmersivas”. Espacios donde acabar con agujetas de decir “pa-ta-ta”. En Barcelona hay estos 6. 

Ikono

(tercera planta del centro comercial Arenas)

Nuevo imán de tiktokeros y demás especímenes fotogénicos. Experiencias instagrameables y decorados zen que relajarían hasta al increíble Hulk. Lo mismo caminas con la boca abierta entre farolillos blancos flotantes que sacas tu adrenalina tiktokera en una piscina de bolas. Se llama Ikono. Y ese es su objetivo, resume su CEO: “Crear una colección de lugares icónicos”.  

Sacando adrenalina instagramer en la piscina de bolas futurista de Ikono.

Sacando adrenalina instagramer en la piscina de bolas futurista de Ikono. / ELISENDA PONS

Fernando Pastor es el CEO y cofundador de esta ‘startup’ sevillana. Tenía 21 años cuando abrieron el primer centro. Ahora con 24, van por el tercero. Hace dos años y medio que inauguraron el de Madrid. A finales del año pasado, Roma. Este jueves, 16, ha subido la persiana el de Barcelona, en la tercera planta del centro comercial Arenas (Gran Via de les Corts Catalanes, 373).

Los baños tienen bañera y pinball.

Los baños tienen bañera y pinball. / ELISENDA PONS

La piscina de bolas te abduce nada más entrar. Tardas 30 segundos en tirarte por el tobogán de aire futurista-industrial. Al menos 5 minutos en recuperar la dignidad tras lograr salir andando a lo Chiquito. Clic, clic, clic. Enseguida pasas del formato chikipark al posado ‘influencer’. Das un paso y estás en la calle de ‘Blade runner’. Dos más y te pierdes por un laberinto de hojas de metacrilato inspiradas en Botticelli. Le echas morritos y algún 'pataky' por encima de tus posibilidades. La media de las visitas es de una hora. Hay quien está dos y media. Hay sala de camuflaje, cubos gigantes de luz, cueva fluorescente, hasta los baños son instagrameables: tienen bañera y pinball

La idea surgió tras un viaje a Japón -recuerda Fernando-: ¿por qué no replicamos –se preguntaron- espacios que permitan vivir una experiencia única y auténtica? En total, hay 10, sin contar las piruetas del perro robot. Incluso se puede dibujar con luces y jugar en los tres arcades de la salida. Añadirán una sala próximamente. “Vamos a traer más animales futuristas”, adelanta Fernando. ¿El objetivo? “Que se te quede esa experiencia –responde- grabada en la retina para siempre”. / Precio: 18 €; 12,50 €, de 4 a 13 años. 


Paradox Museum

(Plaza de Urquinaona, 3)

Una de las fotos con truco que hacer en Paradox Museum.

Una de las fotos con truco que hacer en Paradox Museum. / Ricard Cugat

“Espera lo inesperado”, te advierten antes de entrar. No es una metáfora, no. Aquí puedes terminar con la cabeza servida en un plato, caminar por el techo de la cámara acorazada de un banco con más parsimonia que los de 'La casa de papel' o discutir con un piano más respondón que Siri. Hay ventanas que asoman al infinito, habitaciones interminables, caleidoscopios ideal selfies y un túnel por el que es inevitable ir haciendo eses como si te hubieras ido de fiesta con Froilán.  

Nada tiene sentido y, sin embargo, todo es totalmente real”. Es el leitmotiv de este museo de las paradojas. También se ha inaugurado este jueves, 16. Es el primer Paradox Museum que abre en España, tras los de Oslo, Estocolmo y Miami. Se inaugurarán media docena más en lo que queda de año.   

Caleidoscopio formato selfies.

Caleidoscopio formato selfie. / RICARD CUGAT

  Jurarás que te has colado en el país de las maravillas de Alicia. Hay más de 70 exhibiciones basadas en paradojas: visuales, interactivas, inmersivas. El bombardeo selfi se adereza con ciencia, ilusiones ópticas, trucos de mago. Se te quedan la misma sonrisilla de lado de no-puede-ser que al leer las noticias del Tito Bernie. ¿El objetivo? “Apelar a las emociones –te garantizan durante la visita-. Son experiencias que te hacen pensar dos veces”. Todo se puede tocar. Cada pieza va con QR explicativo. Esto es ‘edutainment’, que dicen ahora: entretenimiento educativo. Aquí, insisten, te hacen “cosquillas en la mente”. / Precio: 18 €. De 4 a 12 años, universitarios, mayores de 65 años y discapacitados: 14 €.  


Museo Magic World

(Casp, 50)

Apagando un dragon a manguerazos en el Museo Magic World.

Apagando un dragon a manguerazos en el Museo Magic World. /

“Aquí hay que ser fotógrafos, modelos y actores”, te informa Javiera al entrar. Y sí, acabas poniendo más caras peliculeras que Laporta cuando le hablan de árbitros. “Trick Art”, lo llaman. Hay 38 cuadros 3D en los que colarse. Con el encuadre adecuado, puedes acabar escapando de un cocodrilo, salir de la boca de un tiburón o apagar a un dragón a manguerazos, Te montas en unicornios, caminas por el techo, te tumbas un rato en la luna. “Diviértanse –te lo dicen con tono de garantía-, vuelvan a ser niños”.  

Dos encuadres con truco de Magic World.

Dos encuadres con truco de Magic World. /

Vienen tanto ‘influencers’ como niños con sus abuelos, dice Marilyn Böhme, la mánager del Museo Magic World. “Hay gente que está media hora y familias que se quedan tres”. Se te pasan dos sin enterarte. Al principio da apuro. A la media hora ya te tiras por los suelos echándole más teatro que un futbolista. 

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Los ideólogos de Magic World, en su ascensor de vértigo. /

Se lo inventaron dos austriacos: Frederik Lehner y Alexander Laber. Abrió a finales de 2021, en plena oleada covid. A estas alturas, ya han venido un par de clientas con bolsas de Zara para hacerse fotos con distinta ropa. “La gente –cuenta Marilyn- llega a bailar cuando ponemos canciones de los 80s-90s”.  / Precio: 11 €, de 6-99 años. 


Big Fun Museum

(La Rambla, 88)  

Fregadero de la casa del gigante del Big Fun Museum.

Fregadero de la casa del gigante del Big Fun Museum. /

Son 8 museos en uno: 2.500 metros cuadrados fotografiables en tres plantas. Paseas entre donuts gigantes, récords Guinness, bosques de espejos a lo Lewis Carroll. Te puedes colar por el fregadero de la casa de un gigante o colgarte de las lámparas de una casa al revés. Acabas con agujetas de hacerte selfies.   

Habitación al revés de Big Fun Museum.

Habitación al revés del Big Fun Museum. /

Es un clásico de las Ramblas: Big Fun Museum abrió en diciembre de 2018. Suelen tener entre 200 y 300 visitantes por día, calculan; 800, durante el fin de semana. Se ven muchos padres con cara de niños. “El Mago Pop –tiran de anecdotario- hizo un especial para Netflix en nuestro museo y Elrow realizó un ‘streaming’ donde pincharon tres ‘djs’. / Precio: 20 €. Pack con el Museo de las Ilusiones: 25 €. 


Museo de las Ilusiones

(Pintor Fortuny, 17) 

Fue el primer museo de Barcelona en el que interactuar con pinturas 3D: abrió en el 2015. Aquí puedes luchar con Darth Vader, mantear a Messi, colarte en una pintura de Dalí o presenciar cómo la cagan Putin y Trump: ahí están, compartiendo lavabo contigo. En total, hay 70 murales a elegir -los van cambiando cada año- en los que incluso han venido parejas a hacerse sus fotos de boda. / Precio: 10 €. Pack con el Museo de las Ilusiones: 25 €.   


Sensas

(Entença, 91)

Hace dos años que abrió en Barcelona la primera “experiencia sensorial” de España. Es un invento francés que pone a prueba los cinco sentidos. Ya hay 24 locales por el mundo. Tiene más de ‘escape room’ que de postureo, aunque también acabas posando en una habitación invertida . Espacio de ocio con moraleja: “Crear concienciación”, apuntan, sobre la diversidad funcional.  

Foto 'finish' de Sensas.

Foto 'finish' de Sensas. /

“Venimos a redescubrir nuestros sentidos”, resume tu guía sensorial antes de empezar. Son seis talleres: 12 retos que ponen a prueba gusto, tacto, olfato, oído, vista, capacidad motriz. Dos horas a tientas. El 80% del recorrido se hace a oscuras. Se recomienda no leer antes las preguntas frecuentes de la web. Dejan sin responder la de “¿hay animales vivos?”.

¿Que para qué poner a prueba los sentidos? “El motivo principal –detalla la guía - viene a raíz de esta frase hecha: ‘No sabía lo que tenía hasta que lo perdí’. No tenemos que llegar al extremo de que nos falte un sentido para darnos cuenta de que los otros están infravalorados”. / Precio: 28 euros. 

Aún hay un séptimo espacio, ahora en reformas: The Set Lab (General Álvarez de Castro, 6). “El primer espacio creativo de fotografía para usuarios de redes sociales”, se proclamó al estrenarse en 2020. Prevé reabrir antes de Semana Santa. “Será más interactivo”, anuncian.  

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