Nuevo decreto

Barcelona permite hacer surf con mala mar bajo la responsabilidad del practicante

También obligará a pagar a quien organice actividades deportivas con ánimo de lucro en las playas de la ciudad

Un surfista se dispone a entrar en el agua de la playa de la Barceloneta con mal tiempo

Un surfista se dispone a entrar en el agua de la playa de la Barceloneta con mal tiempo / Zowy Voeten

Gisela Macedo

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El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado esta semana el Decreto de Alcaldía que regula y ordena el uso deportivo de las playas de la capital catalana. El decreto tiene como objetiva garantizar la "convivencia de usos en las playas" y presenta dos novedades principales: permite practicar surf con mala mar bajo la responsabilidad del practicante, y obliga a pagar a quien organice actividades deportivas con ánimo de lucro.

El concejal de Deportes, David Escudé, ha defendido las medidas explicando que "en los últimos años, ha crecido el número de personas que hacen deporte en las playas de Barcelona. Queremos seguir potenciando esta relación desde la seguridad y el respeto por tal de garantizar una convivencia sana y estable entre todas las personas que hacen uso de estos más de 5 kilómetros de equipamiento deportivo al aire libre".  

La guerra de los surfistas

El decreto establece que está permitida la práctica del surf, windsurf y paddle surf tanto en situación de pre-alerta como de alerta del Plan Básico de Emergencia Municipal por mal estado del mal (PAEM), y que en estos casos será el practicante quien asumirá la responsabilidad de practicar estos deportes en estas circunstancias.

Los surfistas llevaban tiempo en "guerra" con el ayuntamiento por este asunto. La Guardia Urbana les obligaba a salir del mar cuando había bandeja roja, ya que esta actividad estaba prohibida en la capital catalana cuando se daban en estas circunstancias. Reclamaban que "les dejaran en paz" y les permitieran coger olas tranquilos, como ya ocurría en otros municipios catalanes.

No obstante, sobre esta nueva regulación el consistorio matiza que "las fuerzas y cuerpos de seguridad, excepcionalmente, podrán prohibir esta práctica si perciben que hay un riesgo grave y concreto para la seguridad de las personas", y que no está permitida la práctica de surf, paddle surf o windsurf cuando haya activación de la fase de Emergencia del PAEM. Además, desde el ayuntamiento recomiendan que las personas que practiquen estos deportes tengan una licencia federativa o seguro.

Finalmente, el decreto recuerda que en temporada media y alta, cuando la zona de baño esté delimitada con boyas, el uso de esta zona es exclusivo de los bañistas.

Pagar por actividades lucrativas

En cuanto a las actividades deportivas organizadas por terceros, la nueva normativa exige que, cuando supongan un beneficio económico por su práctica, deberán contar con un permiso administrativo y, en función de la actividad, cumplir con los requisitos mínimos para su práctica, como contar con un seguro de responsabilidad civil o con titulación profesional. Además, estas solo se podrán llevar a cabo en la arena de las playas de Sant Sebastià, Somorrostro, Nova Icària, Bogatell y Mar Bella.

Asimismo, los organizadores tendrán que abonar una tasa para "contribuir al mantenimiento de la playa", cuyo importe vendrá determinado según la ordenanza fiscal 3.10 del Ayuntamiento de Barcelona.