Fiebre de celebraciones: restaurantes, 'discos' y hoteles de Barcelona vivirán un Fin de Año histórico

Como reacción casi visceral a dos fines de año marcados por la pandemia y las restricciones, barceloneses y turistas parecen haber salido de aquel letargo con más efervescencia que nunca y posibles récords en la hostelería. A escasos días de Nochevieja, son muchos los restaurantes de Barcelona que ya han colgado el lleno para sus menús especiales (los más caros del año), mientras que los hoteles prevén la plena ocupación. Hay ganas de celebrar a lo grande, fuera de casa, el año que finaliza, y no parece que las previsiones macroeconómicas ni la inflación estén afectando a las ganas de fiesta.

Los distintos empresarios de la restauración y hoteleros consultados coinciden en que no solo hay una demanda muy alta, sino que a un ritmo de reservas superior que en los años de prepandemia. A favor de Barcelona jugarán el calendario, por caer en sábado, y la meteorología, que consultan muchos viajeros antes de decidir a última hora dónde empezar el año. El clima casi primaveral que está viviendo la ciudad, en contraste con otros puntos de Europa, será el empujón definitivo, sumado al furor viajero tras la pandemia.

La capital catalana, que vive su temporada baja turística entre diciembre y febrero, suele tener un pico muy alto de ocupación en las fechas concretas de Fin de Año. Pero todas las fuentes coinciden en que este puede ser un año histórico, o como mínimo en los tres últimos lustros en los distintos ámbitos de actividad propios de esa fecha.

Manel Casals, director del Gremi d'Hotels de Barcelona, apunta que los establecimientos estarán a "plena ocupación", llenos en las zonas más céntricas y casi llenos en el resto de la ciudad, tras dos años de contención viajera y al caer en fin de semana. Avanza que aunque enero es un mes flojo, los muchos congresos a partir de febrero hacer prever un buen 2023.

Según el portal 'jetcost.es', "Barcelona es la más solicitada por los viajeros franceses e italianos, la segunda por los alemanes y portugueses, y la cuarta por los británicos y neerlandeses". No obstante, el Observatori del Turisme a Barcelona señala en su último informe que las búsquedas del destino Barcelona aún están por debajo de 2019 en el conjunto del periodo navideño.

En la actualidad, el aeropuerto de Barcelona conecta con 153 destinaciones aéreas, 36 de las cuales son intercontinentales. Es decir, un 10% por debajo de antes de la pandemia.

Se destaca también que la mayoría de visitantes estas fechas llegan en pareja, y con una estancia superior a los tres días. Y que la mayoría de reservas hoteleras las hacen (de mitad de diciembre a Reyes) franceses y estadounidenses. Sin olvidar el habitual esprint de peticiones de última hora. Y que propuestas como las 'campanadas' que regresan al pie de la Font Màgica y esperan más de 20.000 asistentes, son otro reclamo internacional para turistas indecisos.

Galas 'sold out'

Hoteles con gran tradición de galas de Fin de Año, como el Majestic Hotel & Spa, con una de las ofertas más exclusivas de la metrópolis, donde esa noche coinciden muchos barceloneses y viajeros, explican que las reservas de alojamiento ya rebasan el 90% a estas alturas, mientras que sus dos cenas (entre las más cotizadas de la ciudad) están al completo desde hace días. De hecho, subrayan que no recuerdan haber vendido todas sus mesas tan rápido en años previos.

Una situación similar vive otro gran lujo, el Hotel El Palace Barcelona, con previsión de ocupación entre el 90 y 100% el fin de semana, y llenos tanto en su Salón Gran Via, como en la cena de la azotea, así como en el restaurante Amar, su gran novedad del año.

En The One Barcelona, están actualmente al 87% de ocupación para la gran noche, aunque su director, Vincent Studer, enfatiza a este diario que han llenado ya todas las suites y habitaciones grandes. "Se percibe más ganas de gastar" y turismo de calidad, apunta. Solo les quedan disponibles las de menor tamaño y coste. Y para su espectacular cena en Somni este miércoles ya solo quedaban 12 plazas.

Las previsiones son también extraordinarias en los hoteles Monument, Condes de Barcelona y Hotel España, donde fuentes del grupo indican que están ya en el nivel de ocupación de 2019 (95%), pero con el matiz de que los dos primeros con precios un 35% superiores. En Monument Hotel incluso han añadido un nuevo espacio de cenas, el Glass, junto a su terraza, que casi esta completo, mientras que su restaurante Lasarte (Martín Berasategui) ofrecerá la cena más sibarita de la ciudad, a 780 euros por persona con la misma suerte.

La historia se repite en muchos restaurantes de la ciudad, especialmente en el centro y el litoral, especialmente demandados. Así, uno de los más reputados, el Windsor (con menú degustación de seis pasos a 175 euros más bebidas), colgó el 'lleno' hace días, "antes que nunca", destaca su director y propietario Joan Junyent.

Cena y música

Desde el Gremi de Restauració de Barcelona corroboran el éxito de celebraciones en la hostelería, con cifras que creen que serán "de récord", señala su director, Roger Pallarols. La patronal percibe "euforia" en el "paréntesis navideño", donde la vuelta a la normalidad "se vincula a bares y restaurantes, que recuperan el protagonismo que les corresponde", con una "gran respuesta de la ciudadanía". Ello, no obstante, no borrará la crisis de inflación y suministros que está afectando gravemente al sector desde verano, añade.

No solo van como un tiro los espacios consolidados. También en el Eixample, establecimientos nuevos de moda, como Jacqueline Barcelona, que también sirve copas tras el ágape, llenó tan rápidamente que han ampliado el espacio de cenas para albergar nuevas plazas. Misma suerte corrió Gatsby en Tuset, con el reclamo añadido de espectáculos en vivo, y el 'sold out' colgado hace días.

La fórmula de cena y música es especialmente demandada, como también ha sucedido en la zona de Nova Bocana, al lado de mar. Velíssima ya tiene vendidas casi todas sus mesas, con una Nochevieja de glamur italiano a 275 euros. En el Front Marítim, aún quedan las últimas plazas para combinar cenas y fiesta 'disco' en establecimientos como Opium Mar (300 euros con bebidas de cena) y Carpe Diem (325 con botella de Dom Pérignon por pareja, y fiesta oficial de esta marca).

Precisamente, el ocio nocturno vaticina su mejor año en lustros. Desde el Gremi d'Empresaris de Discoteques de Barcelona i Província, su secretario general, Ramon Mas, señala que un 75% de las entradas ya se han vendido, con algunos locales ya sin disponibilidad. "Las ganas de volver a celebrarlo y que caiga en sábado" han alentado la demanda, explica, haciendo un llamamiento a una noche tranquila en la que se respete el descanso vecinal.

En la misma línea, desde la Fecasarm, Quim Boadas apunta que el ritmo de venta de entradas es superior a 2019, gracias a la digitalización que ha vivido el sector y que ha disparado los tíquets anticipados. La patronal anima a este tipo de compra para "evitar aglomeraciones la misma Nochevieja, cuando la gente no encuentre locales donde poder entrar".

El sistema reduce mucho las colas y permite planificar la noche. Estima que la facturación superará a la prepandemia, con llenazos en la mayoría de salas consolidadas de toda Catalunya.

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