Se lo disputa con Braga y Bruselas

Barcelona aspira a ser la capital europea de la democracia 2023-2024

El ayuntamiento presenta candidatura para ser la primera ciudad que obtiene este reconocimiento

Proceso participativo de 'El Carmel mossega', en Barcelona.

Proceso participativo de 'El Carmel mossega', en Barcelona. / B-MURALS

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Barcelona ha sido preseleccionada para ser elegida capital europea de la democracia durante el curso 2023-2024. Es la primera vez que la organización European Capital of Democracy (ECoD) escogerá a una ciudad para otorgarle este título. La sede elegida acogerá conferencias y encuentros con líderes políticos del continente, "un acontecimiento con una notable repercusión internacional", asegura el ayuntamiento. 

La urbe catalana se disputa el reconocimiento con la ciudad portuguesa de Braga y la capital belga, Bruselas. ECoD prevé anunciar qué ciudad se impone en enero de 2023. El Ayuntamiento de Barcelona ha explicado que el jurado de la organización ha preseleccionado a las tres finalistas tras visitar 13 ciudades candidatas y evaluar los programas que han presentado. La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, recibió a los integrantes de ECoD a principios de noviembre pasado.

El concejal de Derechos de la Ciudadanía y Participación, Marc Serra, ha postulado que la capitalidad europea de la democracia “puede ser una oportunidad para dar a conocer el modelo de participación de Barcelona". El edil ha señalado que contribuiría a "reconocer a la ciudadanía su rol protagonista en estas políticas, y para seguir avanzando en la innovación democrática y en la implicación de la ciudadanía en los asuntos que les afectan en el día a día”.  

La elección de una ciudad como sede de la democracia está promovida por ECoDgemeinnützige GmbH y el Instituto de Innovación en Política, con sede en Viena y Berlín y con socios en 16 países europeos. El consistorio ha subrayado que Barcelona ha impulsado proyectos "relevantes" para promover la democracia, como la plataforma de participación ciudadana Decidim, el espacio municipal Canòdrom dedicado a la innovación digital y democrática y "numerosos procesos de participación, algunos de alto impacto y con mucha implicación ciudadana, como las 'superilles' y los presupuestos participativos", destaca.