Vivienda

La mitad de las personas sin hogar de Barcelona llevan menos de 5 años en la ciudad

Un análisis del IERMB concluye que las personas extranjeras protagonizan el sinhogarismo en la ciudad

En el 2021 se efectuaron más de 3.300 desahucios en el área metropolitana de Barcelona

Una persona duerme en la calle en Barcelona

Una persona duerme en la calle en Barcelona / Enric Fontcuberta

El Periódico

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El sinhogarismo y la exclusión residencial han aumentado durante las últimas décadas a Europa. En el caso del área metropolitana de Barcelona, hay síntomas “evidentes” de que la tendencia es la misma, según un análisis que ha publicado este sábado el Instituto de Estudios Regionales y Metropolitanos de Barcelona (IERMB). 

De acuerdo con los últimos datos disponibles, de 2021, se estima que hay un mínimo de 1.493 personas sin hogar en el área metropolitana de Barcelona, de las cuales 1.120 duermen en la calle. De estas, 895 están en la ciudad de Barcelona, 92 en L'Hospitalet, 48 en Badalona, 28 en Santa Coloma, 20 en Sant Boi, 19 en Sant Adrià del Besós, 14 en Ripollet, 4 en Gavà, 3 en la Palma de Cervelló y 1 en el Papiol.

Para Albert Sales, investigador del IERMB y experto en sinhogarismo, es "preocupante" que siga subiendo el número de personas que duermen en la calle en la ciudad de Barcelona, a pesar de que hayan aumentado el número de plazas en centros para alojar a personas sin hogar. Entre el 2008 y el 2021, estos espacios aumentaron en un 138%, llegando a las 2.808 plazas disponibles. "Lo que falta es prevención y políticas estructurales para combatir la exclusión social”, asevera el experto.

El análisis del IERMB también concluye que, en Barcelona, las personas extranjeras protagonizan el crecimiento en el número de personas que duermen en la calle en la ciudad. La encuesta a las personas sin hogar atendidas por el programa Municipal de Atención a las Personas Sin Hogar de Barcelona desvela que la mitad de ellos hace menos de 5 años que residen en la capital catalana (el 50,7%).

En referencia al tiempo que llevan en la ciudad y a su país de origen, se observan algunas diferencias por género. La proporción de mujeres que están aquí desde hace más de 4 años sin ser originarias de la ciudad o del país es significativamente superior a la de hombres. Preguntadas sobre dónde vivían anteriormente, solo un 13,5% afirmaron haber vivido siempre o desde la infancia en Barcelona, un 29,5% expresan proceder de otro municipio catalán, un 25% de otro municipio del Estado -fuera de Catalunya-, y un 30% dijeron que residían en otro país justo antes de instalarse en la ciudad.

Otro dato que se desprende de este análisis es que el 26% de los encuestados, a pesar de estar atendidos en Servicios Sociales específicos para personas sin hogar, no han dormido nunca en la calle. En el caso de las mujeres, esta proporción supera la mitad, un 51%. Aquí cabe recordar que una persona sin hogar no es solamente quien vive en la calle, sino que se refiere a quien no tiene un lugar donde vivir en condiciones de habitabilidad humana.

El 57,7% durmió por primera vez en la calle en Barcelona

Cuando se preguntó a los y las encuestadas dónde estaban la noche antes de entrar en un recurso de alojamiento, solo un 24% respondieron que dormían en la calle. Según los autores del estudio, este resultado confirma la "gran permeabilidad "entre las diferentes situaciones de exclusión residencial. Un 33% contestaron que estaban en otro tipo de recurso de Servicios Sociales (entre los cuales se cuentan pensiones pagadas por los servicios municipales mientras se espera plaza en un centro). Un 17% estaban en una pensión, un hostal o una habitación de realquiler (costeado con sus propios medios). El resto contestaban otras situaciones con frecuencias muy diversas, pero siempre por debajo del 6%. El 57,7% durmió por primera vez en la calle en Barcelona.

Otra de las conclusiones del análisis es que hay un desplazamiento hacia el centro de la ciudad de Barcelona a medida que las personas profundizan en su proceso de exclusión. Las personas migradas tienen más riesgo de quedarse sin hogar en todas partes, pero cuando se quedan sin techo tienden a buscar estrategias de supervivencia en la ciudad de Barcelona.

Según Albert Sales, “Barcelona es el punto de llegada de situaciones de exclusión residencial que tienen un recorrido muy largo”. Así pues, vemos como el 85% dice no disponer de un espacio que considere su hogar desde hace más de un año. También sabemos que solo un 27,6% de las personas encuestadas estaban en una vivienda propia (de propiedad o de alquiler), antes de quedarse sin hogar. El 23,5% vivían en pisos compartidos y el 21,3% en casas de familiares. Se constata, pues, la poca frecuencia con que la gente que requiere el apoyo de los servicios residenciales ha tenido acceso a la tenencia de una vivienda.

El problema de la vivienda en el área metropolitana

El estudio analiza también el riesgo de desahucio como situación de vivienda insegura. En el año 2021, se practicaron en el área metropolitana de Barcelona más de 3.300 desahucios. Sergio Porcel, jefe del área de cohesión social y urbana de la IERMB y uno de los autores de la investigación, explica que “el 77% son a causa de impagos de alquiler y el resto de impagos hipotecarios" y que " el sobreesfuerzo en el pago de la vivienda sitúa la metrópoli de Barcelona, junto con Catalunya y el España, en uno de los niveles más elevados del contexto europeo”. 

Sobre este punto, hay que destacar que alrededor del 40% de los hogares metropolitanos que viven de alquiler destinan más de un 40% de sus ingresos a hacer frente a los gastos de la vivienda