Política energética

Barcelona llenará rondas y túneles de placas fotovoltaicas

El consistorio ya ha instalado láminas solares en dos puntos de la Ronda de Dalt y la Ronda Litoral y ya trabaja en el montaje de las del túnel de la Rovira

Con una inversión de 10 millones de euros, se espera alimentar medio centenar de ubicaciones que permitan generar el 40% de la energía que requieren las rondas

placas solares Barcelona

placas solares Barcelona / Ferran Nadeu

Carlos Márquez Daniel

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Hubo quien pensó que, por cercanía, se trataba de una 'performance' del CosmoCaixa. O quizás fuera una iniciativa de la Universitat Oberta de Catalunya, que tiene la sede justo encima. Pero no, y lo lógico es que no fuera así, porque se trata de un arteria de circulación pública y resultaría raro que un privado sacara partido de la infraestructura. Es el Ayuntamiento de Barcelona quien ha instalado unas coloristas placas fotovoltaicas en la Ronda de Dalt, a su paso por la avenida del Tibidabo. No son las primeras ni serán las últimas: el consistorio tiene entre manos medio centenar de montajes similares, tanto en esta vía como en otras arterias de la capital catalana susceptibles de convertirse en imanes de energía renovable para cubrir el consumo de la propia infraestructura.

Detalles de las nuevas placas fotovoltaicas

Detalles de las nuevas placas fotovoltaicas / Ferran Nadeu

Se han colocado también en el techo de la boca sur del túnel de la rambla de Badal y en la Ronda Litoral, a la altura del Poblenou (entre Bac de Roda y Lope de Vega), y se está trabajando para hacer lo propio en el túnel de la Rovira. En paralelo, asegura el ayuntamiento, hay 36 proyectos más redactados y otros siete están a día de hoy en proceso de redacción. Toda la energía que generen estos paneles se destinará al autoconsumo de los túneles (iluminación y ventilación) para que sean autosuficientes energéticamente, o lo máximo posible.

Ciudad "inteligente"

El objetivo, señala el consistorio, es "descarbonizar lo máximo que se pueda las infraestructuras viarias, que son grandes consumidoras de energía". Las placas de Badal ocupan 960m2 de techo. Serán capaces, esa es la previsión municipal, de generar un potencia de 66 kWp (pico de kilovatios) y buena parte servirá para iluminar todo el túnel , que tiene los focos encendidos 24 horas al día. Esta instalación está en fase de legalización, y se prevé que se ponga en marcha próximamente. La del túnel de la Rovira tendrá cerca de 1.000m2 y permitirá generar 95,5 kWp, lo que dará para encender toda la galería e incluso producirá excedente. Tras la impermeabilización de la cubierta se procederá al montaje de las placas. la puesta en marcha está prevista para 2023. Janet Sanz, teniente de alcalde de Urbanismo, explica que este proyecto es "una buena oportunidad para seguir avanzando hacia la ciudad que queremos, más inteligente y más sostenible, que sabe aprovechar los recursos naturales para alimentar sus infraestructuras urbanas".

Circulación en la Ronda de Dalt junto a las placas de colores, este martes

Circulación en la Ronda de Dalt junto a las placas de colores, este martes / Ferran Nadeu

En cuanto a las rondas, de hecho, y al margen de los montajes ya terminados en Sant Gervasi y el Poblenou, se trabaja con otros proyectos dentro del plan europeo INMAB, que tiene como objetivo "mejorar la sostenibilidad, la seguridad y la capacidad" de estas dos arterias que abrazan Barcelona y sus vecinas inmediatas. Se ha realizado un estudio para detectar cubiertas, muros y espacios verdes del entorno de las rondas (también equipamientos cercanos, como centros deportivos, bibliotecas o mercados) para determinar cuántas ubicaciones son susceptibles de albergar placas solares.

Dos millones anuales

En total, el ayuntamiento ha definido 53 emplazamientos en los que es posible ubicar placas fotovoltaicas. Todas ellas permitirían generar cada año 6.319 MWh, lo que representa el 40% de la energía que necesitan las rondas. La inversión total ronda los 10 millones de euros y una vez amortizado el montante, toda la instalación, siempre según el consistorio, permitiría un ahorro de consumo energético anual de unos dos millones de euros. A partir de este análisis, se han redactado ya 36 proyectos y otros siete están en proceso de redacción. Sanz destaca que las placas se han elegido de manera que se "integren de la mejor manera posible con el paisaje urbano". No ayudarán a reducir los atascos, pero harán que la luz sea más sostenible.

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