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De las plumas de Ayuso al discreto Aragonès

En Barcelona no hay la fiesta de Madrid, pero no por eso los eventos son menos interesantes

aragones ayuso

aragones ayuso / Archivo

Joan Vehils

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La fortaleza del grupo editorial Prensa Ibérica es que tiene 25 marcas informativas líderes, y desde el jueves 26, repartidas por todo el territorio español. Así, uno puede estar el lunes en Madrid en el 30 aniversario de la revista Woman y la noche siguiente celebrar el Català de l’Any en Barcelona. O sea, observar en directo que Ayuso nada tiene que ver con Aragonès.

El lunes, la presidenta de la Comunidad de Madrid apareció envuelta en un vestido con plumas de la marca creada por Vicky Martín Berrocal. Es decir, que eligió una firma española. A Ayuso, se le notaba que se sentía guapa y eso que venía de un día movido. "Hoy me han dado por todas partes", comentaba entre bambalinas tras un día ajetreado por la crisis de la sanidad madrileña. Sin embargo, en el Casino, rodeada de artistas, modelos, autoridades y miembros de la farándula, que no siempre la ven con buenos ojos, recibió la ovación de la noche. Fue tras un discurso más propio de una política socialista que de la líder de la derecha madrileña.

Fue, incluso, más aplaudida que los premiados. Y es que en Madrid se aplaude mucho más fuerte que en Barcelona, se abraza con más intensidad y se vive la noche, aunque sea lunes, como si no hubiera un mañana. Estaba en la capital una mejicana que ejerce de embajadora ilustre de Barcelona. Digo esto porque la modelo Jaydy Michel, esposa del entrenador del Barça Athletic y exfutbolista, Rafa Márquez, está encantada de vivir en el Turo Park y así se lo explicaba a Boris Izaguirre y al director general de Prensa Ibérica, Sergi Guillot.

Los 40 años de Aragonès

El president, Pere Aragonés, estuvo en el premio Català de l’Any. A diferencia de Ayuso prefirió evitar la alfombra roja y entró discretamente con su esposa, Janina Juli Pujol, por la puerta trasera del MNAC. Eso sí, antes de empezar el acto se mostró cercano al presidente de Prensa Ibérica, Javier Moll, y la vicepresidenta, Arantza Sarasola. Aragonés no quiso tampoco perder la oportunidad de charlar con el premiado CEO del Mobile, John Hoffman, y con Gran Dalton, el máximo responsable de la Copa América. Hoffman y Dalton son dos tipos reconocidos por todo el mundo y que han apostado por nuestra ciudad. Es una apuesta sentida, pero eso no exime que Hoffman aprovechara su discurso para advertir que Barcelona no podía dormirse y puso deberes a sus dirigentes. Dalton, por su parte, cuenta con la garantía de tener a su lado a la mejor ejecutiva que podía contratar para que el evento sea un éxito. Ella es Aurora Catà. La nueva vicepresidenta de ACE Barcelona que lucía con su habitual elegancia la camisa oficial de la Copa América.

John Hoffman (GSMA) y Gran Dalton (Copa América) en la gala 'Català de l'Any'

John Hoffman (GSMA) y Gran Dalton (Copa América) en la gala 'Català de l'Any' / El Periódico

Aragonès no tuvo un 'no' para nadie. Fotos, consejos, peticiones… Así que se fueron tarde de la gala y con la misma discreción con la que habían entrado. Lo hicieron minutos antes que el president celebrara 40 años. Pues sí, es muy joven. Lo celebró el miércoles con su mujer y su hija, Clàudia, en uno de esos pocos momentos que su dilatada agenda se lo permitió. En Barcelona no hay la fiesta de Madrid, pero no por eso los eventos son menos interesantes. Asistieron la delegada del gobierno, Maria Eugènia Gay; la alcaldesa de l’Hospitalet, Núria Marín; Jaume Guardiola, Pau Relat, Joan Roca, Elena Fort o Miquel Camps. Y acabo citando al otro triunfador de la noche, el músico Lucas Bun. Su actuación fue espectacular. Triunfará.

Shakira en casa de Josep Oliu

Shakira y Ozuna rodaron el videoclip de Monotonía en un estudio de Manresa. Los planos exteriores se realizaron en un supermercado del barrio de la Sagrada Familia de esta localidad y en espacio propiedad del presidente del Banc de Sabadell, Josep Oliu. Se trata de un complejo medieval del siglo XIII, situado en Callús y que consta de una pequeña iglesia desacralizada y un conjunto de espacios recuperados para realizar eventos exclusivos. Y fue en un anexo a la iglesia Godmar donde se encuentra la rectoría donde Shakira y Ozuna pudieron rodar con tranquilidad y sin paparazis. De todas formas, hay quien dice que Josep Oliu fue de los pocos que pudo ver en directo parte de la grabación.