Política lingüística

El gobierno Colau rechaza que el pregón de la Mercè sea siempre en catalán

Los socios de gobierno votan por separado a una propuesta de Cs sobre el bilingüismo, si bien se reconcilian luego desechando la petición de ERC para priorizar el catalán en los pregoneros

Ada Colau y Jaume Collboni, en una imagen de archivo

Ada Colau y Jaume Collboni, en una imagen de archivo / EFE

Jordi Ribalaygue

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El catalán ha sido este martes el nuevo motivo de discrepancia entre Barcelona en Comú y el PSC, los dos socios del gobierno municipal de la capital catalana. Ambas formaciones se han dividido en la comisión de Derechos Sociales del ayuntamiento ante las propuestas antagónicas que Cs y ERC han presentado sobre el uso de la lengua catalana en actos del consistorio.

Los ‘comuns’ de la alcaldesa Ada Colau se han alineado con Esquerra y Junts para desestimar la contrapropuesta con la que la formación naranja ha abogado por el bilingüismo y la libertad de elección de idioma frente a una proposición de los republicanos, que han reclamado que el catalán prevalga en los pregones de la Mercè, las intervenciones de los concejales y la programación cultural municipal. En cambio, el PSC se ha puesto del lado de Cs, junto a PP y Valents. Más tarde, el bipartito se ha reconciliado rechazando el ruego de ERC, frustrado porque el principal partido de la oposición se ha negado a retirar la petición de priorizar el catalán también en el discurso de la fiesta mayor.  

El debate ha propiciado que la oposición subraye las diferencias que Barcelona en Comú y PSC han vuelto a evidenciar. El concejal socialista Joan Ramon Riera ha sostenido que el ‘procés’ independentista ha conducido a que la lengua catalana esté en retroceso entre los jóvenes de la ciudad, según advierte una reciente encuesta municipal, y que les resulta “antipática”. “Hay que volver a hacerla atractiva. El talibanismo identitario ha generado rechazo social y más dificultades para promover el catalán entre los jóvenes”, ha advertido Riera.

Por su parte, el teniente de alcalde de Cultural, Jordi Martí (Barcelona en Comú), ha considerado que los socialistas se han desmarcado de la línea habitual de la formación, que respaldó cambiar la legislación a principios de año para preservar la inmersión lingüística en las escuelas. “Espero que sea una pequeña tormenta, y que el PSC esté en la mayoría. No nos tenemos que felicitar nunca de que un partido quiera salir del consenso de la lengua”, ha señalado Martí.

El teniente de alcalde de los 'comuns' ha desmentido que el catalán se quiera imponer al castellano y que el español esté marginado en Catalunya. En cambio, Cs, PP y Valents han hablado de un “ataque sistemático” a quienes reclaman más enseñanza en castellano y han acusado al ejecutivo local de dar aire a una supuesta “imposición monolingüista”.    

Enzarzados por el pregón

Por otro lado, el gobierno de Colau se ha mostrado crítico con el contenido de la petición de ERC para potenciar el catalán en la programación cultural del consistorio. Martí ha instado a la republicana Gemma Sendra a modificar la súplica para no impedir que el pregonero de la Mercè pueda expresarse también en castellano. “Le da la razón a los que hacen el discurso de que se quiere imponer el catalán”, ha avisado el teniente de alcalde. Sendra ha justificado que Esquerra no pretende prohibir ninguna lengua. Al mismo tiempo, ha afeado que el gobierno municipal suela emplear el castellano en actos en distritos periféricos, como Nou Barris.

La discusión ha rebrotado en el ayuntamiento mientras el gobierno municipal prevé presentar un paquete de medidas a finales de año para tratar de frenar la regresión del catalán entre la juventud, en especial en los distritos más humildes. El Ayuntamiento ha encargado a un grupo de lingüistas y expertos que elaboren una propuesta. Junts y ERC se mostraron satisfechos, si bien han opinado que la reacción del gobierno municipal llega tarde. En cambio, las fuerzas del centro derecha constitucionalista han reiterado que también cabe proteger el castellano. 

El concejal posconvergente Joan Rodríguez ha opinado que las divergencias entre ‘comuns’ y PSC revelan que el ejecutivo local tendrá “un problema” para acordar una estrategia para fomentar el catalán. El edil ha atribuido el voto de los socialistas a favor del bilingüsimo a un “intento patético de apropiarse de un espacio electoral en decadencia en esta ciudad”, en referencia a Cs. Martí ha replicado a Junts que no puede dar lecciones de unidad en gobiernos de coalición, en clara alusión a la ruptura de las fuerzas independentistas al frente de la Generalitat.