Perspectivas de crecimiento

Barcelona prevé un buen año turístico en 2023 con el regreso de asiáticos y más congresos

La ciudad cerrará el año con entre un 80 y un 85% de los viajeros de 2019, pero un mayor gasto y estancia medias

Turistas en el centro de Barcelona.

Turistas en el centro de Barcelona. / ELISENDA PONS

Patricia Castán

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A dos meses de cerrar el 2022 como año de la gran recuperación turística, Barcelona afronta el 2023 con el reto de consolidar los mercados que han regresado y reconquistar los asiáticos. El presidente de Turismo de Barcelona, Eduard Torres, se ha mostrado optimista este miércoles en sus previsiones para el próximo año ante la apertura del mercado chino (el mayor del mundo) a partir del segundo trimestre y la gran agenda de congresos y convenciones que atesora la ciudad.

Como ya se estimó en el último balance, se afianza la idea que el este año se cerrará con entre un 80 y un 85% de viajeros respecto a los récords de 2019. Un resultado destacable teniendo en cuenta que en el primer trimestre hubo muy poca actividad y que el gasto medio de los viajeros se ha incrementado un 34%.

El concejal de Turismo, Xavier Marcè, ha destacado que la ocupación media en cambio habrá alcanzado puntas del 90%, lo que significa que se han producido estancias más largas. Esta es una de la prioridades de la ciudad, ya que si los visitantes pernoctan más noches generan más ingresos sin aumentar los volúmenes de viajeros y conllevan un uso menos intensivo de los focos más masificados.

Distintos frentes

Torres ha explicado que 2022 ha sido un año con "efecto salida" tras meses de restricciones, por lo que hay incertidumbres sobre si se mantendrá ese ímpetu viajero. No obstante, a favor de la ciudad juegan la recuperación firme de los mercados de proximidad europeo y del estadounidense, así como la inminente reapertura (si nada lo impide) de los distintos mercados asiáticos que este año han estado ausentes, empezando por el chino.

Ha añadido que la llegada de fondos europeos Next Generation y los preparativos de la Copa América de Vela 2024 también alientan ese optimismo.

Como "sombras", se mantienen una posible reducción de turistas británicos y alemanes, por el escenario macroeconómico, así como la ausencia del mercado ruso por la guerra de Ucrania.

En cualquier caso, las previsiones son muy buenas en el ámbito de congresos, ferias y convenciones. Además de una agenda nutrida de convocatorias internacionales que este año serán aún más presenciales, Barcelona es candidata a otras 130 citas a las que aspira. Además, el director del programa Convention Bureau de promoción y captación de esta actividad en Barcelona, Christoph Tessmar, acaba de ser nombrado director de la ICCA, la asociación de congresos y convenciones internacionales, ha explicado Torres, lo que también supone un impulso al sector en la capital catalana.