Pacificación limitada

La retirada de la losa de Sant Antoni empezará la próxima semana

El anteproyecto del ayuntamiento, presentado este lunes a los vecinos, prevé un tramo totalmente pacificado y otro con carriles para el bus y la carga y descarga 

La urbanización definitiva, que se pondrá en marcha en junio, contempla una plataforma única de piedra natural, zonas verdes, espacios para el paseo y áreas de juego

La losa de la ronda de Sant Antoni

La losa de la ronda de Sant Antoni / Álvaro Monge

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Solución salomónica y previsible. El ayuntamiento ha presentado la noche de este lunes a los vecinos el anteproyecto definitivo para la urbanización de la losa de Sant Antoni. Habrá una parte totalmente pacificada, el tramo que va desde Villarroel a Floridablanca (esquina Casanova), y otro, el techo que transcurre entre Villarroel y Urgell, acogerá una zona de carga y descarga (en horas determinadas) además de un carril exclusivamente de bajada para el autobús. En ambos se integrará el paso de bicicletas. Con esta propuesta el consistorio prevé contentar tanto a los vecinos partidarios de mantener el espacio solo para uso peatonal como a los que abogan por volver a permitir un mínimo de circulación y, así, atajar las denuncias por incivismo que aseguran se han enquistado en la zona. 

Un millón de euros

El anteproyecto recoge también finalizar el eje verde de Tamarit (entre Urgell y Villarroel), la transformación de la plaza del Pes de la Palla en una gran área de juego infantil y la creación de una zona para el descanso y el paseo en el espacio ahora totalmente anodino que es el cruce entre Casanova y Floridablanca. El nuevo trazado supondrá la desaparición del carril de bus que actualmente circula en sentido contrario por Urgell y garantizar una buena conexión del transporte público . El calendario para los trabajos tiene como fecha señalada el próximo lunes, 14 de noviembre, día en que por fin se retirará la losa, demanda que los vecinos llevan reclamando desde 2018, cuando el mercado de Sant Antoni dejó la carpa provisional para trasladarse a su ubicación definitiva. El presupuesto para dicha actuación es de un millón de euros e incluye adecuar el pavimento para poder pasear hasta que se ejecuten las obras definitivas.  

Alcorques, parterres y 160 árboles

Los trabajos para eliminar la plataforma de hormigón terminarán en marzo, momento en que se licitará la obra y se elaborará el proyecto ejecutivo, previa participación ciudadana para acabar de concretar la propuesta. La intención del consistorio es empezar la urbanización definitiva a finales de junio, después de las elecciones municipales. El resultado será la desaparición total del asfalto que será sustituido por un pavimento continuo de piedra natural que abarcará de fachada a fachada. Para resolver la falta de espacios verdes -se llegará a los 1.800 metros cuadrados- se colocaran alcorques y parterres con árboles -160 ejemplares, 50 de ellos nuevos-, arbustos y flores. Habrá, también, espacios para actividades, zonas de paseos y sombra, y áreas para juegos infantiles. Las obras supondrán añadir 15.600 metros cuadrados para uso ciudadano. 

Proceso de diálogo

El anteproyecto presentado es, a juicio del ayuntamiento, fruto del proceso de diálogo mantenido con los vecinos y entidades del barrio “para encontrar un punto de equilibrio entre las diversas voluntades manifestadas en relación a la pacificación del espacio y el paso del transporte público”. De los encuentros salieron las premisas básicas con las que se ha formulado la propuesta: más espacios verdes, zonas de paseo, consolidación del carril bici, eliminar el actual carril bus en sentido contrario de la calle de Urgell y habilitar espacios con franja horaria para la carga y descarga.