Los 5 distritos de Barcelona que estrenan contenedores a partir de esta semana

Cinco distritos de Barcelona, es decir, la mitad de la ciudad, estrenan contenedores de basura nuevo a partir de esta semana. Se trata del inicio de la segunda fase del macrocontrato de limpieza municipal, que se renueva cada 10 años y que ha estrenado material fijo y vehículos este 2022. Así, el consistorio anuncia la sustitución gradual de 12.600 contenedores de reciclaje en Sants-Montjuïc, Les Corts, Sarrià-Sant Gervasi, Horta-Guinardó y Nou Barris y la incorporación de 534 vehículos de limpieza, dos tercios de los cuales eléctricos e insonorizados.

En marzo ya llegaron a las calles de la capital las primeras unidades del nuevo modelo de contenedor, más bajo y fuera de las esquinas para mejorar la visibilidad de los conductores. Así, se suprimen aparcamientos en tramos de acera para colocar un contenedor de cada color, a fin de invitar más al usuario a utilizarlos todos. El gobierno municipal promete que el cambio de contrato comporta "un aumento de la limpieza" de calles y plazas, con más personal de tarde y en festivos, GPS en todos los equipos y una flota más sostenible. Así mismo, asegura que habrá un plan para cada barrio, específico para las necesidades y demandas vecinales, a fin de mejorar la percepción que tiene la ciudadanía sobre el estado de limpieza de su entorno.

Y es que la limpieza ha escalado posiciones entre las preocupaciones de los barceloneses y llegó a ser señalada como el segundo mayor problema de la ciutat (tras la inseguridad) en el último barómetro municipal. Ha arraigado entre muchos vecinos la percepción que Barcelona está más sucia que otras ciudades, con varias polémicas este verano por ejemplo sobre la presencia de ratas en plena plaza Catalunya. El plan de choque estival no ha logrado frenar las críticas y la limpieza se encamina a convertirse en una pesada cruz para la campaña electoral de Ada Colau. Además, una huelga de barrenderos se cierne sobre las fiestas de la Mercè.

Barredoras para los carriles bici

Entre las novedades más vistosas, está maquinaria adaptada para limpiar rincones difíciles, como barredoras más estrechas para los carriles bici y carros autopropulsados para subir más fácilmente las calles empinadas. El gobierno de Ada Colau confía también en la llegada de equipos polivalentes para resolver situaciones sobrevenidas, así como un incremento del baldeo con agua freática (no potable) a través de un uso más eficiente de este recurso escaso. El objetivo municipal es llegar a un 55% de tasa de recogida selectiva en 2025, el próximo mandato.