TMB pone en circulación siete buses más de hidrógeno

El 23 de septiembre de 2020, cuando todo el debate estaba centrado en el covid y las escuelas, Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) anunciaba la compra de ocho autobuses de hidrógeno, los primeros en formar parte de un servicio público en todo el Estado. El ganador del concurso público fue el fabricante portugués Caeaton Bus, por un importe de 6,4 millones de euros. Aunque la compañía dijo que los vehículos llegarían en 2021, finalmente será ahora cuando empezarán a circular por las calles de la ciudad. El primero, de hecho, ya se estrenó en abril. Y según Laia Bonet, presidenta de TMB, con inesperados buenos registros a nivel de consumo. Los otros siete, para antes de la verbena.

La empresa tiene entre manos un plan de modernización de la flota. Y si todo sale según lo previsto, en 2025, el 40% de los 1.140 autobuses serán de cero emisiones. No generaran gases pero sí micropartículas a través de los frenos y del contacto de los neumáticos. En ese porcentaje deberían estar incluido los 60 de hidrógeno que se prevé que ya formarán parte de la familia móvil de TMB. Para los próximos dos años, la compañía espera contar ya con 210 vehículos híbridos y 154 eléctricos, además de los de hidrógeno.

La flota

El resto, diésel y gas natural comprimido (GNC). La inversión total superará los 400 millones de euros hasta 2026. A favor de TMB, que este tipo de tecnología sostenible será cada vez más barata, del mismo modo que los coches eléctricos también van suavizando sus precios aunque siguen muy por encima de los de combustión.

El análisis de las primeras seis semanas de circulación del primer bus de hidrógeno arroja datos interesantes. Y esperanzadores para los intereses del transporte público. Bonet ha explicado que se esperaba un consumo de nueve kilos de hidrógeno cada 100 kilómetros, pero la media ha sido de 6,82 kilos. En verano se espera un incremento del consumo del 40%, con el cual la media ponderada a lo largo del año sería de 7,51 kilos.