El verano llega en mayo: una semana rozando los 30ºC en Barcelona

Una masa de aire caliente procedente del norte de África, que además vendrá acompañada de una ola de polvo sahariano, enfilará las temperaturas en gran parte de la península Ibérica, en toda Catalunya --habrá que estar muy atentos a los termómetros en las zonas del interior de Lleida y Tarragona donde podría romperse la barrera de los 40ºC-- y también afectará de pleno a Barcelona.

El alza progresiva de las temperaturas comenzó el pasado lunes y llegará a su culmen el próximo fin de semana con unas máximas a la hora de la sobremesa que se acercarán a los 30ºC en Barcelona, sin descartar que en algunos barrios del interior de la ciudad se pueda alcanzar esa cota, si se dan todos los condicionantes para ello, como son un cielo totalmente despejado y que el viento no haga acto de presencia.

Sin respiro por la noche

La posibilidad de estar más o menos cerca de esta cota estará condicionada a la marinada, que es el viento que sopla de mar a tierra y que, por la diferencia de temperatura entre el agua del mar y la superficie terrestre, acaba refrescando el ambiente, y a la probabilidad de que se presente algo de nubosidad en el cielo que frenaría un poco las temperaturas.

En cuanto a la temperatura nocturna, tampoco darán un respiro y es probable que esté rozando o alcanzando los 20ºC que, sumado a un alto porcentaje de humedad -por encima del 70%-, no nos librará de ir encadenando noches tropicales.

Será a partir del lunes que las temperaturas comenzarán a moderarse aún manteniéndose entre 7ºC y 8ºC por encima de la media ponderada de los últimos 30 años.

Esta canícula severa se alargará hasta mediados de la semana que viene, con lo que cabe la posibilidad de que se acabe convirtiendo en uno de los meses de mayo más calurosos del ciclo histórico. Un mayo en Barcelona que perfectamente podría compararse a nivel meteorológico a julio o agosto. Un mayo completamente veraniego.