Apuesta por la vivienda dotacional

Barcelona limitará las residencias de estudiantes también en suelo de equipamiento

El consistorio les aplicará el PEUAT, como ya sucedía en las erigidas en terrenos sin limitaciones de uso en el centro

En las zonas con menos presencia turística podrán abrir pero con una distancia mínima y no más de 350 plazas

Zowy Voeten

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Toni Sust

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En Barcelona, cuenta la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, hay 79 residencias de estudiantes con un total de más de 13.000 plazas, de las que 39 están en suelo de equipamiento y 40 en suelo de zona, sin limitaciones de uso. Del total, 18 han superado la tramitación necesaria y están a la espera de recibir la licencia y abrir. Una de ellas es la de Drassanes, que suscitó una protesta vecinal.

Las 40 residencias en suelo de zona suman 3.000 plazas. Las 39 en el de equipamiento, 10.000. Esa gran diferencia, este desequilibrio, tiene una explicación que Sanz ha resumido así este martes: “El mercado ha ido a ocupar el suelo de equipamiento porque es más barato y genera más beneficios. Como el precio final es el mismo en uno u otro suelo, pero te ha costado menos, ganas mucho más”.

Incremento de un 25%

Sanz ha subrayado que esta situación ha llevado a que en los últimos años el suelo de equipamiento dedicado a residencias en Barcelona se haya incrementado un 25%, lo que ha generado quejas vecinales en las zonas afectadas. “Hay que ordenar y limitar la posibilidad de más residencias en suelo de equipamiento, como hicimos ya con el Plan especial urbanístico de alojamientos turísticos (PEUAT) en la zona de suelo”, afirma la concejala.

Ahora, el consistorio quiere trasladar esas limitaciones a los suelos de equipamiento. Limitaciones que son las que siguen: no se permiten nuevas residencias en zonas de decrecimiento, el centro de Barcelona, y de mantenimiento de plazas, la corona que rodea al centro, excepto en los casos en los que se cierre a cambio un hotel o un albergue de juventud. Y en el resto de Barcelona, se permitirán con una distancia máxima y un número de plazas que no supere las 350.

3.000 plazas como tope

El ayuntamiento sostiene que el sector privado tiene que poder apostando por este tipo de plazas para estudiantes, pero de otra forma, mediante la vivienda dotacional, es decir, pisos temporales para gente que tenga dificultad para emanciparse, para jóvenes, gente mayor, miembros de colectivos vulnerables, mujeres que sean víctimas de violencia de género, investigadores, artistas, según la lista que ha expuesto Sanz.

“Las residencias de estudiantes en suelo de equipamiento ocupan 13 hectáreas. Lo que proponemos es que el suelo de equipamiento privado que pueda ser para vivienda dotacional y residencias tenga un tope”, ha relatado Sanz. Para el sector privado se reservan 3.000 pisos potenciales, 10 hectáreas de espacio. En la ciudad hay 4.300 pisos dotacionales públicos. Ese número no cuenta con limitación normativa para crecer.

Sanz subraya que los vecinos piden más pisos dotacionales en todos los distritos, y destaca que la MPGM está planteada para que haya un reparto de la oferta por todas sus zonas, al igual que prevé frenar la concentración de oferta privada.

Nueva ordenanza

La nueva normativa contará con una ordenanza que abordará los precios en la vivienda dotacional privada, que se equipararán a los de la pública: de 350 a 400 euros mensuales por piso. Sanz ha anunciado que también se buscará reducir los de las residencias: “Queremos establecer lo que hemos negociado ya en algunos casos en los últimos tiempos. Que dentro de las residencias haya precios más asequibles”.

Según la teniente de alcalde, en algunos casos recientes se ha acordado de forma voluntaria que un 30% o un 40% de las plazas sean más asequibles. “Ahora, con la MPGM, el 100% de plazas deberán tener ese precio asequible. Hoy una habitación doble vale 700 euros mensuales en una residencia de estudiantes. Ahora queremos que no pueda superar los 500 o 550 euros. La habitación individual de una residencia privada es ahora de 900 a 1.200 euros. Queremos que no supere los 600 euros”.