Impulso a un servicio pendiente

La moto metropolitana de Barcelona, más cerca

Noventa representantes de distintos sectores de la movilidad participarán en una mesa creada por el AMB para dar impulso al vehículo compartido sobre dos ruedas

En la foto una moto sharing o de alquiler por horas. FOTO DE RICARD CUGAT

En la foto una moto sharing o de alquiler por horas. FOTO DE RICARD CUGAT / RICARD CUGAT

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El Área Metropolitana de Barcelona ha creado este lunes, en el contexto del Consejo de la Movilidad, la Mesa Metropolitana de la Moto Eléctrica Compartida, un organismo integrado por cerca de 90 representantes del ámbito de la movilidad.

El grupo de trabajo que arranca ahora centrará su labor en analizar hasta qué punto resulta viable la existencia de un posible servicio metropolitano de moto eléctrica compartida, con el objetivo de estudiar y definir cuáles son las principales características que pueda requerir la regulación de este servicio.

Un asunto “estratégico”

“La movilidad compartida es un tema estratégico para el AMB, a la vista de que fomenta una movilidad más sostenible. Es una alternativa y un complemento de movilidad que permite a los usuarios acceder a vehículos cuando lo necesiten, optimizando su uso y sin la necesidad de tener uno en propiedad”, advierte el vicepresidente de Movilidad, Transporte y Sostenibilidad de la corporación metropolitana, Antoni Poveda.  Poveda ha destacado en relación con la creación de la mesa sobre la moto eléctrica compartida que este sistema “permite reducir la contaminación y promueve las energías limpias”.

Todavía no está claro cuándo podría materializarse un proyecto que supondría un acicate del transporte compartido en el Área Metropolitana de Barcelona. En función del debate y de las conclusiones a las que lleve en los próximos meses, el AMB se planteará apostar por un servicio metropolitano de motos compartidas.

Acuerdo de mandato

No es que la iniciativa se ponga sobre la mesa ahora sin previo aviso. La gestión de un servicio de movilidad compartido que funcione en el ámbito metropolitano es uno de los retos fijados en el acuerdo de gobierno del AMB para el mandato actual, de 2019 a 2023, y en el plan metropolitano de movilidad urbana, con un periodo de vigencia que va de 2019 a 2024.

En la mesa creada participan los ayuntamientos metropolitanos, así como los grupos políticos que participan en ellos. También figura la Generalitat de Catalunya. La Dirección General de Tráfico, la Fundació RACC, la Autoridad del Transporte Metopolitano, Barcelona de Serveis Municipals y Barcelona Regional (empresas del consistorio), la Cámara de Comercio de Barcelona y el Institut d’Estudis Regionals i Metropolitans son otros de los actores que están en el asunto.

En cuanto a asociaciones, cabe subrayar la presencia en la lista de PIMEC, la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (ANESDOR), la Associació d'Empresaris de Transport Discrecional de Catalunya (AUDICA), la Associació General d'Autònoms-Pimes Transportistes de Catalunya (AGTC), la Associació per a la Promoció del Transport Públic (PTP), entre otras. Del campo académico constan en el grupo el Col•legi d'Ambientòlegs (COAMB) y la Universitat de Barcelona (UB).

Operadores de 'motosharing'

La mesa cuenta con algunos participantes especialmente afectados por el futuro de la movilidad compartida, y también por su presente. Son las principales empresas que operan en el mundo del ‘motosharing’: Acciona Mobility, Cityscoot, Cooltra, Yego, Movo (Cabify), Reby, Tucycle, Seat Mó, Helbiz y Ducky Logistics.

La mesa tiene previsto un calendario en el que destacan dos grandes jornadas. La primera se celebrará a finales de junio y se dedicará analizar el ejemplo de otras experiencias europeas en movilidad compartida.

A este encuentro serán invitadas las ciudades de Lisboa, Madrid, Milán y la propia Barcelona, entre otras. La segunda jornada está prevista en otoño próximo, y en ese caso los que serán escuchados son los operadores de los servicios en curso de ‘motosharing’. Además, tendrán lugar seis sesiones técnicas de trabajo entre octubre de 2022 y enero de 2023, dedicadas a distintos aspectos: el funcionamiento de un servicio de moto eléctrica compartida; el sistema de uso de datos y la plataforma de servicio; la seguridad, el vandalismo, el abandono de vehículos; el aparcamiento; los modelos de regulación, y el ámbito operacional.