Barcelona muestra su “máxima sorpresa” por la anulación de la ZBE y recalca que sigue vigente

Eloi Badia, concejal de Emergencia Climática y Transición Ecológica, ha sido el encargado de comentar por parte del Ayuntamiento de Barcelona la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) de anular la ordenanza municipal que regula la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) al entender que faltan informes que avalen algunas restricciones.

La reacción es de estupor: “La sentencia nos ha causado sorpresa y perplejidad. Va en la dirección contraria de los tribunales europeos, que nos piden qué hacemos para mejorar la calidad del aire y que nos piden que justifiquemos las moratorias de la Zona de Bajas Emisiones”. “Nos juzgan dos veces”, ha agregado en alusión a los tribunales europeos y al TSJC.

“La sentencia nos ha causado sorpresa y perplejidad. Va en la dirección contraria de los tribunales europeos"

Eloi Badia Casas

Badia ha recordado que la sentencia no es firme y ha asegurado que “deja en indefensión a los que sufren el aire de la ciudad” y ataca lo que ha definido como “una herramienta consolidada” que ha sido adoptada por 300 ciudades europeas. El concejal ha subrayado que pese a la sentencia, la ZBE está vigente en Barcelona: “Si mañana un vehículo sin etiqueta entra en la zona vetada en el horario prohibido, será multado”. “Seguiremos trabajando, no podemos dejar a los vecinos desprotegidos”, ha añadido.

"La ZBE está vigente en Barcelona: Si mañana un vehículo sin etiqueta entra en la zona vetada en el horario prohibido, será multado”.

Eloi Badia Casas

Reunión con la Generalitat

El concejal no ha precisado si el consistorio presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo (tiene 30 días para hacerlo), como parecería lógico, porque esta decisión se aplaza ante la reunión que este martes celebrarán los ayuntamientos, la Generalitat y el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). De hecho, ha apreciado que el gobierno de Ada Colau había recibido el texto poco antes de su comparecencia, que se ha producido a las 18.30.

Badia ha recordado que el viernes, los consistorios y el Gobierno catalán anunciaron la decisión acordada de que todos los municipios de más de 20.000 habitantes de Catalunya tengan zonas de bajas emisiones, un total de 67 localidades que en principio deben haber implantado el sistema en 2025.

Una cifra que lleva más allá la norma estatal, que fija la obligatoriedad a partir de 50.000 habitantes. Barcelona, ha subrayado el edil, es un ejemplo de esta vía que ahora recibe el rechazo judicial.

La oposición

Los grupos de la oposición han comentado la sentencia. Por ERC, el concejal Max Zañartu ha afirmado: “Lamentamos que el gobierno, como ocurrió con el PEUAT, vuelva a demostrar que no es capaz de que las cosa salgan bien a la primera”. Zañartu ha agregado que la situación puede propiciar “una oportunidad para replantear la ZBE” y que sea “más eficiente y más equitativa”.

Junts per Catalunya ha culpado a la alcaldesa y al primer teniente de alcalde, Jaume Collboni, de la “chapuza” en la ZBE: “No se pueden hacer peor las cosas”. El grupo de Elsa Artadi ha emitido un comunicado en el que recuerda que compartió “el espíritu” de la ordenanza pero también que defendía “modular algunas medidas” y “una aplicación más racional y progresiva” del plan. “En buena parte, la sentencia del TSJC nos da la razón”, advierte Junts, que insiste en que está a favor de la medida pero no desde “la imposición y la falta de diálogo”.

La presidenta del grupo de Ciutadans, Luz Guilarte, ha calificado de “desgobierno” la gestión de Colau y Collboni y “excesivamente restrictiva” y propia de “una guerra al vehículo privado” la aplicación de la ZBE en Barcelona. Guilarte también cree que la sentencia da la razón a su grupo y reclama que se anule las multas ya impuestas. Valents, grupo presidido por Eva Parera, ha recordado: “Advertimos de que era una medida injusta y desproporcionada. La justicia nos ha dado la razón”. El PP ha solicitado al gobierno de Colau que “deje sin efecto” la ZBE.