La UB alerta que la calidad del aire en Barcelona es "un problema grave"

La calidad del aire asociada a la contaminación del tráfico es "un problema grave" en Barcelona, en especial en los distritos de Ciutat Vella, Sants-Montjuïc, Les Corts y Horta-Guinardó, según investigadores de la Universidad de Barcelona (UB).

El estudio 'xAire', publicado en la revista 'Science of the Total Environment', ha registrado valores de dióxido de nitrógeno (NO2) en Barcelona que superan las directrices europeas y de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La universidad, junto a la empresa 4Sfera y el Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado por la Fundación la Caixa, ha analizado la concentración del dióxido de nitrógeno, vinculado al tráfico, en 725 localizaciones de Barcelona entre febrero y marzo de 2018. "Se han medido niveles muy altos, con una media anual de 49 microgramos por metro cúbico, por encima de los límites de la directiva europea y de la OMS, que se sitúan en 40 microgramos por metro cúbico", detallan los investigadores.

Duplicando el valor

Los resultados muestran que más del 5% de las muestras duplican el valor de 40 microgramos por metro cúbico. "Los valores obtenidos en Ciutat Vella, Sants-Montjuïc, Les Corts y Horta-Guinardó son especialmente preocupantes, ya que son sensiblemente superiores a los de las estaciones oficiales más cercanas", han añadido. El proyecto 'xAire' también ha contado con la participación de 1.650 alumnos y familias de 18 centros educativos de Barcelona que utilizaron la información facilitada por los investigadores para crear un mapa interactivo de contaminación del aire.

"Los ciudadanos pueden ser actores de la investigación y no solo receptores de un mensaje. Este enfoque de la ciencia ciudadana añade sofisticación y diversidad al proceso de investigación científica", remarca la investigadora de la UB Isabelle Bonhoure. Según el equipo investigador, esta iniciativa permite obtener una mejor estimación del impacto del dióxido de nitrógeno en la salud. "Si reducimos los niveles de NO2, especialmente alrededor de las escuelas, podríamos reducir el asma infantil de manera significativa", ha concluido el jefe de la Iniciativa de Planificación Urbana, Medio Ambiente y Salud de ISGlobal, Mark Nieuwenhuijsen.