Aglomeraciones en la capital catala

6.500 desalojados de botellones la madrugada del domingo en Barcelona

Como en los últimos fines de semana, se han registrado concentraciones significativas en puntos determinados

La Guardia Urbana desaloja un grupo de jóvenes que practicaba botellón en la playa

La Guardia Urbana desaloja un grupo de jóvenes que practicaba botellón en la playa / Manu Mitru

El Periódico

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Desde que el toque de queda desapareció, el fenómeno no se detiene, y no parece nada sorprendente. A la que la gente ha podido salir de noche, lo hace y en masa, preferentemente los más jóvenes, aunque también gente que no lo es tanto, y sobre todo en algunos puntos determinados de Barcelona. Los botellones, como se esperaba, proliferan. La fiesta regresó la medianoche del 9 de mayo. Aquel día se activó por última vez el toque de queda a las 22.00. A las 00.00 ya no existía la restricción, porque ya no había estado de alarma, y los barceloneses llenaron algunas calles y plazas de la ciudad.

Desde entonces, los fines de semana han ido arrojando cifras, la de las personas desalojadas de encuentros multitudinarios, botellones que se dan preferentemente en las playas y algunos puntos determinados. No es sorprendente porque incluso con el toque de queda vigente se detectaron botellones ilegales en Collserola, la Barceloneta y la Zona Franca.

Sin incidentes ni multas

La madrugada de este domingo no ha sido una excepción: un total de 6.515 personas han sido desalojadas de diversos botellones que se celebraban en varios puntos de la ciudad, como playas y el entorno del Arc de Triomf, informa Efe. El número supone a un aumento considerable respecto a los últimos fines de semana. Según la Guardia Urbana, los desalojos de las aglomeraciones se produjeron sin incidentes y no se llegó a tramitar denuncia alguna a los asistentes.

El 9 de mayo, la ciudad vivió las primeras fiestas legales, aunque con concentraciones en las que las medidas sanitarias todavía vigentes, de la mascarilla a la distancia social, brillan a menudo por su ausencia. Cuando llegó el segundo fin de semana, se mantuvo la tendencia. Entre el viernes 14 de mayo y el domingo 16, el dispositivo conjunto de la policía municipal y los Mossos desalojaron a 17.000 personas que bebían alcohol en la vía pública. Los agentes impusieron más de 600 sanciones, entre otros aspectos a gente que no llevaba mascarilla o no respetaba las distancias de seguridad.