Batlle se hace "responsable" de que se borrara el mural del rey emérito

Dos semanas después de que los servicios municipales, por orden de la Guardia Urbana, borraran un mural sobre la libertad de expresión, a raíz del caso de Pablo Hasél y crítico con la figura del rey emérito, ha surgido una voz autorizada del consistorio haciéndose responsable de la controvertida decisión. El teniente de alcalde de Prevención y Seguridad, Albert Batlle, ha reconocido este viernes en una entrevista en la emisora RAC-1 que esa actuación no fue "correcta". "Me hago responsable", ha sentenciado.

En las horas posteriores a la controvertida decisión, Batlle no se pronunció sobre la cuestión. Quien sí lo hizo fue el concejal de Sants-Montjuïc, el distrito donde está ubicado el parque de las Tres Xemeneies, el lugar donde pintó su obra el autor del mural, conocido como Roc BlackBlock. "Ha sido un error", dijo Serra, quien añadió que no había existido una "orden política" para borrar el graffiti. En la misma línea, se expresó la alcaldesa Ada Colau y comunicó también que se le había ofrecido al artista la posibilidad de restituir el mural. Lo hará este domingo, aunque no será el que se borró, ni en el mismo sitio, pero sí en el parque de la avenida del Paral·lel y en una acción colectiva.

Batlle ha considerado que hubo una mala interpretación de la normativa del espacio público, en el sentido de la rapidez con que se actuó. Ha afirmado que esa normativa dice que se han de borrar "las pintadas que puedan ser ofensivas".