balance municipal

Barcelona trata de ganar al mercado del alquiler 816 pisos vacíos en manos de grandes tenedores

Pisos y habitaciones en alquiler en Barcelona.

Pisos y habitaciones en alquiler en Barcelona. / periodico

Patricia Castán

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El censo de viviendas vacías en Barcelona, que el año pasado arrojó un decepcionante balance de 10.052 (1,22% del total de la ciudad), no se ha convertido de momento en un balón de oxígeno para las necesidades del mercado del alquiler. Con la gran mayoría en manos de pequeños propietarios, a los que solo se puede intentar convencer de darles uso,  el consistorio está tratando de forzar la entrada en el mercado de 816 pisos de grandes tenedores, con 200 casos en curso, según el balance de la actividad de la Unidad Antiacoso de Disciplina de Vivienda del ayuntamiento, presentado hoy viernes.

La complejidad de radiografiar y tratar de corregir los abusos o ilegalidades en materia inmobiliaria en Barcelona queda patente en el balance de cinco años de batalla municipal al respecto: 118.587 inmuebles inspeccionados, con el resultado de 9.972 procedimientos abiertos (incluye pisos turísticos ilegales), 926 expedientes abiertos (el 82% a grandes tenedores), 67 sanciones (apenas un millón de euros recaudados) y 14 casos de acoso inmobiliario solucionados.  

El consistorio inspeccionó hasta el 2018 casi 104.000 pisos sospechosos de estar sin uso, con el resultado de apenas 10.000, que desmentía estimaciones previas. Una cifra tan baja que no tiene capacidad para alimentar la demanda de alquileres, ya que se estima que para ello debía llegar al 3%. Pero el consistorio ha tratado de sacar al mercado esos pisos parados, que solo en 1.429 casos se vinculaban a grandes propietarios, y de los que se han podido confirmar 816 con más de dos años sin uso, correspondientes a 702 expedientes. Los altos precios de los alquileres en los últimos años han llevado a su activación, al contrario de los años de la crisis inmobiliaria en que se estimaba que el volumen de pisos cerrados a la espera de mejores tiempos era mucho mayor.

Incentivos al arrendamiento

La concejala de Vivienda, Lucía Martín, señala que con los pequeños tenedores se ha tratado de "fomentar" el alquiler proponiendo ayudas (hasta 20.000 euros para rehabilitar y otras ventajas) de cara a intentar engrosar una Bolsa de Alquiler asequible en la ciudad que en estos momentos suma 920 hogares. Se sabe que las ayudas han incorporado a la bolsa 506 inmuebles desde distintos canales, no solo los vacíos. En el caso de grandes tenedores a los que sí se puede exigir el alquiler, el balance incluye 160 expedientes sancionadores en marcha, y la expropiación temporal de 18 pisos vacíos por interés social.

La 'investigación' también afloró casi 14.000 pisos (1,7% de los 825.000 de Barcelona) con usos distintos al residencial habitual, desde oficinas o empresas (5.798) a segundas residencias (casi 2.000) o domicilios temporales por estudi o trabajo.

La tarea de la Unidad antiacoso, que busca el buen uso de la vivienda como derecho fundamental y evitar el uso especulativo, las malas prácticas, el acoso, la infravivienda o las ilegalidades, entre otros aspectos, con ayuda de las sucesivas regulaciones que han dado armas jurídicas al ayuntamiento, ha servido también para evitar que las grandes rehabilitaciones garantizasen los derechos y calidad de vida de los inquilinos antiguos o su realojo, mediante planes específicos. Se han presentado 475, de los que un 81,5% han sido favorables.

También ha permitido poner orden en las viviendas de protección oficial (quedan 13.500 vigentes en Barcelona), donde tras más de 2.000 inspecciones se han encontrado anomalías en torno al 18% de casos, desde realquileres a precios excesivos a uso no personal.

Además,los  ajustes en la normativa de Vivienda en el 2019 vuelven a avalar que se pueda exigir a los grandes tenedores que ofrezcan un alquiler social antes de desahuciar por impago a una familia vulnerable, como en el caso de la familia de Voski Balyan, de origen armenio, que ilustra este artículo y logró que su arrendamiento pasase de 800 a 300 euros al mes. El ayuntamiento ha dirigido este año 186 cartas a otros tantos propietarios en casos de ese tipo, recordándoles que deben ofrecer el arrendamiento social, y prepara otras 74 notificaciones en trámite.

Realojo y compensaciones

Y aunque la palabra acoso da nombre a la unidad, los casos son relativamente pocos en Barcelona, tal vez por los mecanismos de control desplegados. Se ha trabajado en 36 en estos años (22 eran de grandes tenedores), con 14 acuerdos para la resolución del problema, que han mejorado la vidad de un total de 35 vecinos. Desde realojo hasta compensaciones de 70.000 a 350.000 euros por su marcha. Otros han sido desestimados o están en estudio.

Las 67 sanciones impuestas pueden parecer pocas, pero el consistorio prima las mediaciones y acuerdos, suponen multas por valor de 2,1 millones de euros, de los que hasta ahora se han cobrado menos de la mitad. La mayoría, vinculados a pisos desocupados (39) y con la Sareb como principal sancionado. Por irregularidades en la protección oficial ha habido 20, y por la mala conservación de edificios, 6 casos.