PLENO MUNICIPAL

Colau suaviza las condiciones para edificar vivienda de alquiler social

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Natàlia Farré

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El pleno municipal de este viernes ha tenido tuvo un protagonista destacado, el covid-19, y dos invitados de honor: la vivienda de alquiler asequible y Felipe González. La pandemia ha copado la mayoría de intervenciones del acto, ya fuera de forma directa o indirecta, no en vano sus consecuencias son y serán de aúpa. Eso nadie lo duda. Ni el gobierno de la ciudad ni la oposición. Pero en lo que no hay acuerdo es en la manera de afrontar la crisis que viene ni en el cómo se ha lidiado la que ya ha pasado, la del confinamiento y cierre de gran parte de la economía de la ciudad. En cuanto a la vivienda, lo sucedido se resume en un: el ayuntamiento busca socio privado para construir edificios de alquiler a precios razonables pero, de momento, no encuentra empresa que le baile el agua. Y sobre González, lo esperado. Al supuesto Señor X y a Rafael Vera, exsecretario de estado de Seguridad, habría que retirarles la medalla de oro de la ciudad por el asunto del GAL, a juicio de JxCat. Pero el ruego no ha prosperado. El Ejecutivo municipal ha driblado el asunto para no pronunciarse de manera clara. Sin condena, no hay revocación.

Tentación recentralizadora

Así la sesión ha empezado con un repaso al informe sobre el Estado de la ciudad 2019. Y con las formaciones en su sitio de siempre. El ejecutivo defendiendo su gestión; y la oposición atacándola. De "los muchos anuncios y mucho autobombo, pero pocas concreciones y menos soluciones" de Neus Munté  a "la crisis nos sorprendió en un momento muy bajo, y nos debería haber cogido más preparados" de Manuel Valls. Para continuar con una declaración de intenciones de Colau: "No queremos volver a la normalidad de antes de la crisis si por normalidad entendemos miles de desahucios, precariedad económica, desigualdad y contaminación". Y un ruego: "Permanecer unidos" ya que "en medio de la crisis hay una tentación recentralizadora por parte de todas las administraciones supramunicipales".

El momento para la vivienda de alquiler ha llegado con la presentación de los nuevos pliegos de condiciones para seleccionar un socio privado para Habitatge Metròpolis Barcelona, la operadora que el Àrea Metroolitana de Barcelona y el consistorio crearon en el 2017 para levantar 4.500 viviendas de alquiler asequible. Es la segunda vez que sale a licitación. La primera fue un "fracaso" según todos los grupos de la oposición porque quedó desierta.

"Sabemos que hay interés en el mercado, por lo tanto hay que hacerlo atractivo". Palabra de Lucía Martín, concejala de Vivienda, y en eso está el ayuntamiento. Mucha escenificación en la oposición pero poco más. Pues ningún grupo votó en contra de volver a licitar, esta vez con unas condiciones más flexibles: incremento del beneficio empresarial, menos rigidez en la aportación de capital y los plazos, y solares para la construcción con dirección postal publicitada.

A vueltas con el Hermitage

Antes de llegar al tema que más curiosidad despertaba, el de Felipe González, por aquello de ver cómo se posicionaban los Comuns teniendo como socio al PSC, hubo tiempo para las gasolineras y el Hermitage. A partir de ahora, los nuevos surtidores quedarán limitados a las inmediaciones de las rondas, vías estructurales, áreas industriales y portuarias. Respecto a la sucursal del museo ruso, lo de siempre: Valls insistió en que Barcelona acoja el proyecto en el puerto y el pleno en rechazarlo.

Y al final, Felipe González y la habilidad de Colau por mantenerse en la ambigüedad. ¿Retirar medallas? "Todas" las que hayan recibido aquellos que tengan una «condena», como el propio Vera, Josep Lluís Nuñez o Luis Roldán. Pero en esta categoría no entra el expresidente del Gobierno.