NUEVA INICIATIVA SOCIAL

Nace una red de activistas LGTBI con enfoque metropolitano

Imagen de los asistentes al encuentro de entidades metropolitanas LGTBI celebrado en Santa Coloma

Imagen de los asistentes al encuentro de entidades metropolitanas LGTBI celebrado en Santa Coloma

Aitana Glasser

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El activismo LGTBI ha dado un paso adelante y se ha propuesto unir fuerzas aprovechando la descentralización de las entidades del colectivo en el entorno del área metropolitana de Barcelona. La idea principal, surgida en un primer encuentro el pasado mes de septiembre en Santa Coloma de Gramenet (Barcelonès), se basa en la creación de una red de activistas arraigados en las grandes ciudades, desde donde puedan compartir experiencias y crear sinergias más allá del marco estrictamente institucional.

"Barcelona tira mucho y tiene un poder de convocatoria muy fuerte. Siempre acostumbramos a ir a todo lo que allí se organiza, y el resto de ciudades se quedan un poco en el limbo", explica Vanesa Blanco, presidenta de Tornem-hi Badalona, una de las entidades presentes en este primer encuentro junto con Entenem Santa Coloma, Mataró LGTBI+, Som Masnou, Proud Ripollet, Chrysallis y Barcelona Rainbow Singers. 

"Si vas a Barcelona puedes recibir asistencia puntual en muchos temas, pero es algo más frío, mientras que las entidades locales son algo más próximo", pensado para que la gente del colectivo note ese "calor de ciudad", defiende Blanco. "No se trata de desmarcarse de Barcelona, sino de tener un espacio propio dentro de la provincia", puntualiza la presidenta de Mataró LGTBI+, Heidi Pérez.

Ambas coinciden en la necesidad de ofrecer posibilidades tanto de ocio y cultura como de asesoramiento dentro de su propia ciudad. La idea es conseguir "que si la gente quiere ir a Barcelona, vaya, pero que tenga opciones para quedarse en su ciudad y no se sienta como un champiñón en medio de la nada", dice esta activista, quien añade que, a veces, la gente no es consciente de que hay dudas que se pueden resolver a nivel local. "Nos preguntan por ejemplo qué hacer para cambiar el nombre del DNI; pues no hace falta irse a Barcelona a asesorarlo, porque seguramente en tu ciudad habrá alguien que ya lo ha hecho y pueda ayudarte".

La lucha LGTBI a nivel local

La falta de visibilidad del colectivo en las ciudades y esa voluntad de crear espacios de apoyo motivó el nacimiento de estas asociaciones, la mayoría nacidas recientemente y sin precedentes. En Mataró, por ejemplo, "no había ninguna entidad dedicada a dar visibilidad al colectivo LGTBI y a defender sus derechos", asegura la presidenta de LGTBI Mataró. La agrupación se constituyó formalmente en junio de 2018 por iniciativa de siete mataronenses, pero cuenta ya con casi 50 socios.

También rondan el medio centenar de miembros en Tornem-hi Badalona -bautizada así en honor al dulce típico de la ciudad con ese mismo nombre-, creada en el mismo año por cuatro badaloneses, entre los cuales Vanesa Blanco que, viviendo en Sofía (Bulgaria), empezó a involucrarse en el activismo y a luchar por los derechos de las mujeres y del colectivo LGTBI+. "La sociedad búlgara es muy LGTBIfóbica y muy transfóbica", asegura. "Allí viví situaciones que aquí por suerte no se viven". Por eso, y aunque su experiencia la dejó "quemada", a los dos años de volver decidió implicarse en este nuevo proyecto.

"Badalona necesitaba que le dieran un par de patadas al armario y creí que ese era el momento de hacerlo", cuenta Vanesa. La misma sensación tuvo Noemí Egea cuando decidió sumarse a Entenem Santa Coloma. En su caso, no se atrevió a decir que era bisexual hasta hace apenas un año, poco antes de involucrarse en la entidad colomense, y su experiencia personal también la animó a ayudar a otras personas en su misma situación.

"He sufrido personalmente lo que es la homofobia y creo que hay mucha gente que la sigue sufriendo, por eso es importante que nos apoyemos entre todos y todas, y la mejor manera de hacerlo es a través de las entidades y asociaciones, porque allí encontrarás a gente que, seguro, habrá pasado por las mismas situaciones que tú y que puede ayudarte en muchos aspectos", apunta Egea.

Primer encuentro de entidades

La falta de experiencia -la mayoría de entidades son muy jóvenes-, sumado a las diferentes situaciones en las que se encuentra cada una y la necesidad de darse a conocer, animaron a la entidad colomense a hacer un llamamiento a las agrupaciones de la zona para reunirse. "Los territorios metropolitanos tenemos algunas características comunes y este intercambio de experiencias y opiniones nos ayuda a aprender y a trabajar de manera conjunta", asegura la colomense.

Aunque este encuentro solo fue un primer acercamiento, prevén celebrar uno cada tres meses -el próximo será en enero en Mataró- para empezar a trazar estrategias y proyectos conjuntos y "crear vínculos que antes no existían, porque de hecho ni nos conocíamos", apunta Noemí. Agrupaciones de otras ciudades como L’Hospitalet de Llobregat -donde se acaba de constituir LH Orgull- o Sant Joan Despí ya se han interesado en participar regularmente en estos encuentros, que estarán abiertos a cualquier colectivo que quiera sumarse a ellos.

De momento han podido acercar posturas y extraer algunas conclusiones que, aunque ya imaginaban, ahora confirman. Por ejemplo y especialmente, que aunque comparten lucha y coinciden en muchos ámbitos, la implicación de la Administración local es determinante en su funcionamiento, desde el impulso de campañas locales hasta el simple hecho de tener un espacio físico donde reunirse. "El objetivo de la asociaciones cambiar cosas que están pasando en la ciudad, pero para hacer este cambio necesitas que el ayuntamiento te apoye", sostiene Heidi. 

La implicación de la Administración

"Nosotros -en Mataró- trabajamos mano a mano con el consistorio, hacemos campañas que, en vez de ser solo hacia fuera, para visibilizarnos y darnos a conocer, son también para transformar y para cambiar algunas cosas en ámbitos como educación o salud", apunta la presidenta del colectivo mataronense. En su caso, cuenta que previo a la creación de la entidad ya había voluntad política en materia LGTBI+, lo que les ha permitido también seguir trabajando codo con codo con la administración.

Los casos de Mataró y de Ripollet son, según constataron en la reunión, los casos 'modelo'. Aunque tienen carencias, la implicación de ambos ayuntamientos les permite impulsar iniciativas a mayor nivel y que éstas tengan más visibilidad y repercusión. El caso de Badalona, explica Vanesa Blanco, es de los que más llama la atención, pues pese a ser una de las ciudades más grandes de la zona la situación política y la “lentitud” de la Administración han dificultado el funcionamiento de la entidad.  

Así, y pese a que aseguran que hay buena voluntad por parte del equipo técnico de la concejalía encargada de feminismo e igualdad, tienen dificultades para acceder a ayudas -llevan meses esperando la resolución de una que, de momento, no ha llegado- o para tener un local propio donde reunirse y atender a los socios y vecinos. “Dependemos absolutamente de las instituciones: una entidad local sin recursos no puede hacer según qué acciones si no hay sinergia con el gobierno de la ciudad”, recalca Blanco.

Redes de colaboración metropolitanas

Más allá de compartir experiencias, consejos y vivencias propias, la iniciativa está pensada para que las diferentes entidades se apoyen mutuamente. “Se trata de crear redes de colaboración. Está claro que la gente no cruzará toda Barcelona para venir hasta Badalona a un acto, pero se puede encontrar la manera de expandirlo”, explica Vanesa.

La activista pone de ejemplo el festival Filmets que se organiza en Badalona, que en su última edición ha llevado a cabo una iniciativa con cortometrajes LGTBI en Sant Boi. Es una manera de expandir a nivel metropolitano una iniciativa local, que bien podría replicarse con otros proyectos. Aun así, Heidi Pérez reconoce la dificultad de vehicular y materializar proyectos conjuntos. “Lo veo más interesante y más fácil a nivel comarcal”, asegura, pero defiende la viabilidad de mantener estos encuentros para “apoyarnos, darnos visibilidad y que no todo se centralice en Barcelona”.

Como primer paso, por ejemplo, han creado un grupo de 'WhatsApp' en el que comparten las diferentes actividades que organizan a nivel local, para que el resto de entidades puedan darle difusión en sus localidades y así animar a la gente a que participe en ellas. También seguirán con las reuniones y esperan poder trazar una hoja de ruta con acciones a corto, medio y largo plazo, además de animar a la constitución de más asociaciones locales LGTBI+.

"En el Maresme, pese al territorio que ocupan, solo hay dos entidades LGTBI; en la zona del Besòs tenemos algunas, pero Sant Adrià por ejemplo no tiene. Hay que concienciar de la importancia de crear estas entidades a nivel local y del trabajo que hacen", defiende Noemí Egea, de Entenem Santa Coloma. Porque pese a que "cada vez hay más conciencia" y "hay gente que cree que la lucha del colectivo LGTBI se ha acabado y ya se ha conseguido todo, hay que seguir defendiéndolo y visibilizándolo", apunta Noemí, porque las agresiones y las actitudes LGTBIfóbicas se siguen sucediendo, "de muchas maneras distintas, y cada día".

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