Los Mossos rechazan ubicarse en la comisaría subterránea de plaza de Catalunya

Los Mossos d'Esquadra rechazan instalarse en la antigua comisaría de policía ubicada bajo las fuentes de plaza Catalunya, junto al vestíbulo común de la estación de Renfe y de las paradas de metro de las líneas 1 y 3, por deficiencias de seguridad. El director general de la Policía, Andreu Joan Martínez, ha enviado hoy una carta al teniente de alcalde de Prevención y Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, rechazando la propuesta de abrir ahí una oficina conjunta de recepción de denuncias que atenderían agentes de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra.

"La necesaria ubicación céntrica así como la accesibilidad de la oficina policial conjunta requiere que esta se instale en la superficie, a pie de calle, y no en el subsuelo", explica Martínez a Batlle, y pone como ejemplo la oficina policial conjunta que ya tienen ambos cuerpos en la Barceloneta. "La ubicación en superficie de estas instalaciones policiales facilita la accesibilidad y la proximidad, y colaboran a mejorar la percepción de seguridad del entorno", añade el responsable político de la policía catalana.

Martínez recuerda, para argumentar esa veto, "el nivel de alerta terrorista de 4 sobre 5", en el que "la seguridad de la ciudadanía que acceda y de los trabajadores públicos que estén adscritos debe ser una de las prioridades esenciales en un establecimiento policial céntrico del país". "Es por eso por lo que os proponemos que la ubicación de la oficina policial conjunta sea en el exterior, visible para la ciudadanía y con los adecuados estándares de seguridad", insiste el alto cargo de la Generalitat.

Pensando en los turistas

La reapertura de estas depedencias policiales de la plaza de Catalunya, donde antiguamente estuvo la Policía Nacional y más tarde agentes de Mossos y Guardia Urbana adscritos a la protección del metro y de la estación de Renfe, es una reivindicación de las asociaciones de comerciantes que creen que es muy necesaria para que los turistas que sufren delitos en el centro de la ciudad no tengan que desplazarse a comisarías tan lejanas como la de la plaza de Espanya o la del Poblenou.

La reapertura de una oficina de denuncias céntrica fue también una de los principales acuerdos de la Junta Local de Seguridad celebrada la semana pasada en el Ayuntamiento de Barcelona, bajo la presidencia de la alcaldesa, Ada Colau, y el conseller de Interior, Miquel Buch. Ya entonces  Buch hablaba siempre de una comisaria "en la zona de plaza de Catalunya". mientras Batlle se refería a la de la propia plaza.

El Ayuntamiento ha confirmado que está buscando una alternativa, pero ha culpado a la Conselleria d'Interior de "haber dejado degradar las viejas instalaciones hasta el punto que ahora son inservibles".