LA BATALLA POR LA CAPITAL CATALANA

Forn se abre a "grandes acuerdos" con el PSC en Barcelona

Joaquim Forn.

Joaquim Forn. / periodico

Carlos Márquez Daniel

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A cuatro días del pleno de investidura del Ayuntamiento de Barcelona, el casillero de incertidumbres sigue por delante del de las certezas. En ese segundo cajón se ha sumado este martes la noticia de que Joaquim Forn, número 1 de la lista de Junts x Catalunya, finalmente podrá asistir al cónclave municipal del sábado, del que todavía no está claro quién saldrá con la vara de alcalde. O alcaldesa. En una entrevista concedida a Betevé, el 'exconseller' de Interior, que sigue en prisión preventiva y a la espera de finalizar, esta semana, el juicio por el 'procés' independentista, ha advertido a la líder de Barcelona en Comú de que los hipotéticos votos de Manuel Valls no saldrán gratis. Y que desde su punto de vista, dejar de lado al PSC en "pactos de ciudad" es un error.

Las palabras del también exconcejal, que fue primer teniente de alcalde durante la etapa de Xavier Trias al frente del consistorio, llegan en un momento clave de la negociación por el control de la ciudad. El fin de semana parecía perder peso la opción de Ernest Maragall, ganador de las elecciones del 26 de mayo, después de que las bases de los 'comuns' aprobaran a mano alzada presentar la investidura de Colau. Eso, por raro que sonara, requeriría del concurso de al menos tres ediles de la plataforma que lidera el exprimer ministro francés. Por su parte, y pocas horas después, el socialista Jaume Collboni le recordaba a la actual alcaldesa que sus ocho votos no saldrán gratis: "No tendría sentido votara la investidura de Colau si antes no hemos alcanzado un acuerdo de gobierno". Se supone que están en ello, aunque el alcaldable de Esquerra ha abierto este martes un nuevo frente al abrir una pequeña grieta a la posibilidad de formar un tripartito de izquierdas en la ciudad. 

Nuevas hipótesis

De la entrevista con Forn hecha pública por la televisión pública de Barcelona llaman la atención sus palabras sobre los socialistas: "Al día siguiente de las elecciones, la tercera persona a la que llamé fue Collboni. Le felicité por los resultados. Soy contrario a cualquier tipo de cordón sanitario. Durante la campaña ya dije que Barcelona necesita grandes acuerdos y no tendría sentido prescindir del PSC". Curioso que Maragall sí haya levantado (así ha sido hasta la fecha) un muro a los socialistas por su apoyo al 155 y que Forn, que sigue los acontecimientos desde la cárcel, no vea tan mal pactar con ellos. Habrá quien, en un ejercicio de fabulación vea en esa cercanía una posible ventana para evitar que Colau sea alcaldesa.

Los cinco ediles de JxCat, sumados a los seis de Valls, los ocho del PSC y los dos del PP alcanzan los 21 necesarios para blandir la alcaldía. Pura matemática. Puestos a imaginar pactos imprevisibles, como lo es el de BComú con Ciutadans para evitar a ERC, ¿por qué no los neoconvergentes junto a los firmantes del 155 con el objetivo de apartar a Colau? Suena imposible, como también lo parecía el entente Valls-'comuns'. Más aún, si se escuchan las palabras de la propia alcaldesa cuatro años atrás, cuando existía un cierto run-run sobre la posibilidad de un pacto de perdedores para dejarla sin la alcaldía. Entonces, la exportavoz de la PAH consideró "un fraude de ley y democrático" cualquier eventual mayoría alternativa "contra natura".

En cualquier caso, Forn, en la charla con Betevé, advierte de que en política nada sale gratis: "Colau no puede hacer creer que Valls le regala sus votos a cambio de nada". Sobre ese hipotético pacto, el 'exconseller' asegura que a la alcaldesa "le costará mucho explicarlo" y sostiene que se trata de una operación "orquestada por los 'poderosos' que ella tanto critica y que quieren evitar a toda costa que Barcelona tenga un alcalde independentista". La resolucion, el sábado en el Saló de Cent del ayuntamiento.