CONFLICTO EN UN COTIZADO ESPACIO VERDE

La ubicación de la escuela Entença en unos jardines del Eixample revoluciona al vecindario

Actuaciones frente a los jardines de Marcos Redondo, donde está previsto ubicar unos barracones.

Actuaciones frente a los jardines de Marcos Redondo, donde está previsto ubicar unos barracones. / JOAN MATEU PARRA

Luis Benavides

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La ubicación provisional de la escuela Entença de Barcelona en los jardines de Marcos Redondo, en el barrio de la Antigua Esquerra de l’Eixample, es una “chapuza urbanística” para los vecinos de la zona, que consideran inaceptable la colocación de barracones en medio de la calzada y no quieren perder ese pequeño oasis verde, pues podría ser vallado y convertido en un patio en los próximos meses si el nuevo gobierno municipal no lo impide. 

La ubicación del colegio Entença en estos jardines -delimitados por las calles de Comte Borrell, Buenos Aires y la Avenida de Sarrià- fue comunicada oficialmente a las familias a principios del pasado mes de marzo, tras una reunión en la sede del Consorci d’Educació de Barcelona. Las primeras actuaciones para adecuar el espacio –incluyendo una aparatosa rotura de las cañerías del subsuelo- empezaron esta semana. “Están actuando con total opacidad. Nos enteramos de los planes del ayuntamiento de casualidad, porque nos lo comentó una madre de la escuela”, denuncia la portavoz de la Plataforma d’Afectats Jardí Marcos RedondoChus Llorens, quien también critica la inversión millonaria necesaria para colocar ese centro educativo en la calzada y los problemas de movilidad en el barrio que comportarán.

Los miembros de la Associació de Famílies d’Infants (AFI) de l’Escola Entença entienden el malestar de los vecinos que piden la protección de los jardines y han colgado pancartas en sus balcones en contra de los barracones, pero también recuerdan que es “la única propuesta de ubicación provisional hecha por parte del ayuntamiento” después de más de cuatro años participando de manera activa en una solución definitiva que todavía no llega.

Ondas electromagnéticas

La escuela Entença de Barcelona lleva desde sus inicios, en el curso 2016-2017, en unos terrenos del ayuntamiento en el recinto de la Escola Industrial. Este emplazamiento se ha quedado pequeño y, además, está bajo la influencia de las ondas electromagnéticas que emite una subestación eléctrica situada en la calle de París. El traslado se hizo más urgente si cabe tras el informe desfavorable de la Agència de Salut Pública de Barcelona, que desaconsejó la ubicación junto a la subestación eléctrica bajo el principio de prudencia. No podían garantizar que una exposición prolongada a esas ondas no tuviera consecuencias en la salud de los más pequeños.

Un espacio detrás del Mercat del Ninot suena con fuerza como posible emplazamiento definitivo, aunque requiere un acuerdo de diferentes administraciones. “Si se llegara a firmar el mismo 16 de junio un acuerdo, el día después de la constitución del nuevo gobierno municipal, todavía tendríamos que esperar como mínimo cuatro años. Y los alumnos no pueden estar cuatro años más pegados a la subestación”, explica una portavoz de las familias de la escuela, Constanza Saavedra, indignada porque durante las últimas elecciones municipales algunos partidos políticos  utilizaron esta problemática en clave puramente electoralista para  rascar votos entre los vecinos de los jardines Marcos Redondo.  En este sentido, la plataforma vecinal ve en el cambio de color político en el consistorio “una oportunidad” para parar la reubicación. Se han reunido con varios partidos, explica Llorens, y todos coinciden que "no es el lugar adecuado".  

Alternativas descartadas

La plataforma de vecinos sugiere la reubicación de la escuela, con una sola línea de infantil y primaria, en unos barracones situados en Consell de Cent o en un edificio de la calle de Londres donde actualmente ya hay un centro educativo, la escuela Mallorca, y algunas plantas superiores están libres. El Consorci ya sugirió este edificio en el 2017 y las familias se pusieron en pie de guerra porque consideraban que “no cumplía con los mínimos requisitos” para ser una escuela de infantil y primaria al tratarse de un edificio originalmente concebido como viviendas. La propuesta fue descartada, principalmente por razones de seguridad, recuerda la portavoz de las familias de la escuela.

Los barracones de Consell de Cent, que acogieron al alumnado del instituto Viladomat y recientemente a un grupo de menores extranjeros no acompañados, nunca han aparecido en las reuniones porque, considera Saavedra, su capacidad es bastante inferior a los actuales y los metros cuadrados del patio son insuficientes. "Contar con una ubicación definitiva tan pronto como sea posible será clave para evitar enfrentamientos vecinales", sostiene la asociación de familias de la escuela Entença en su último comunicado.