Colau pospone el nuevo crecimiento de la red de carriles bici

En el primer año de su mandato, el gobierno de Ada Colau anunció su intención de triplicar la red de carriles bici de la ciudad. Por aquel entonces (finales de 2015) contaba con 116 kilómetros y aspiraba a alcanzar los 308 en tres años. Finalmente, la aspiración se ha quedado a algo menos de medio camino, ya que la ciudad dispone actualmente de 209 kilómetros y el ayuntamiento ha anunciado hoy miércoles que deja la nueva fase de crecimiento -parcialmente planificada- para el próximo mandato. O sea, que dependerá de quién se ponga al frente del consistorio.  

La concejal de Movilidad de Barcelona, Mercedes Vidal, ha explicado que el gobierno municipal deja proyectadas -aprobadas en comisión de gobierno- varias mejoras en los carriles bici de la ciudad y la construcción de 45 nuevos kilómetros para conectar mejor la red actual por un presupuesto de 28,2 millones de euros, pero que dependerán del próximo gobierno.

En una rueda de prensa, ha detallado que se trata del segundo proyecto constructivo de carriles de la ciudad, que quiere reducir los carriles en acera y bajarlos a la calzada, transformar carriles bidireccionales en unidireccionales, mejorar los ya existentes, y mejorar la conexión entre ellos.

La concejal ha afirmado que Barcelona registra 205.000 desplazamientos en bici al día y que la ciudad ya dispone de los mencionados  209 kilómetros de carril bici, aunque ha señalado como futuros retos mejorar el enlace entre carriles bici, de la señalización y de las confluencias entre bicicletas y vehículos motorizados.

En noviembre del 2015, cuando se contabilizaban 136.000 desplazamientos al día, se anunció a bombo y platillo que el objetivo era crecer un 67% hasta el 2018. Aunque la política municipal en movilidad ha sido claramente probici, en estos momentos, el auge ha sido del 51% hasta la fecha.

Principales novedades

Entre los carriles que se prevé bajar a la calzada, destacan el de la avenida Diagonal entre el paseo de Gràcia y Sicília y entre plaza de las Glòries y Josep Pla; la de Gran Via entre plaza de España y la plaza de Ildefons Cerdà, así como el del paseo de Lluís Companys, que completará el carril de paseo de Sant Joan.

Asimismo, Vidal ha dicho que se han proyectado nuevos carriles en el paseo de la Zona Franca para conectar la Gran Via con el polígono; en la Diagonal, entre la plaza Pius XII y el parque Cervantes; en la calle de Motors; en pleno centro, en Ronda Universitat, Ronda Sant Pere y Trafalgar, conectando Lluis Companys con Universitat y por primera vez dando accesibilidad a la plaza Catalunya; y en la calle de Ramon Trias Fargas hasta el paseo Marítim.

El plan también prevé mejoras en los cruces de la Gran Via con Bilbao y Rambla Prim, desdoblar los carriles del eje escoles Pies y Santa Fe de Nou Mèxic y en la Travessera de Gràcia, además de mejorar el estado y la pavimentación del carril bici de Ciutat de Granada y su conexión con la Diagonal.

"Dejaremos aprobados estos carriles para que se vayan licitando. No habrá una licitación conjunta. Lo que se haga en el próximo mandato será una decisión política del próximo gobierno. Nosotros dejamos el trabajo hecho, lo que está a nuestro alcance", ha defendido Vidal. "Si se para la máquina, en volverla a arrancar se tardaría muchísimo", ha argumentado.

La ejecución de cada una de las obras se llevará a cabo en el próximo mandato si quien gobierna así lo decide, como hizo el actual gobierno con los proyectos técnicos aprobados por el anterior gobierno del alcalde Xavier Trias (PDeCAT).