Barcelona suma 70 terrazas nuevas en Ciutat Vella desde el 2015

El distrito barcelonés de Ciutat Vella tiene ahora 480 terrazas y veladores, 70 más que cuando empezó el mandato de la alcaldesa Ada Colau, un incremento que se traduce en 206 mesas más. Así lo ha explicado este martes la concejal Gala Pin, que ha presentado el informe elaborado por el gobierno en la comisión especial de seguimiento de la aplicación de la Ordenanza de Terrazas -aprobada en el 2017- en su distrito y que ha forzado la oposición ante las acusaciones de arbitrariedad por parte del gobierno del distrito que llevan meses haciendo los restauradores.

En su intervención, Pin ha sostenido que Ciutat Vella sufre una saturación del espacio público y lo que "se está intentado es dar licencias de terrazas a los nuevos establecimientos sin densificar más", y ha asegurado que "no es una persecución a las terrazas, es un intento de alcanzar el equilibrio". Gala Pin ha destacado que la ratio de mesas por terraza en Ciutat Vella es la más alta de la ciudad, con un 7,23, el doble que las del Eixample o Gràcia.

En la primera sesión de esta comisión han comparecido representantes de ocho establecimientos de Ciutat Vella afectados directamente por traslados, reducciones o eliminaciones de terrazas en aplicación de la normativa de terrazas y que han coincidido en señalar su papel en la convivencia vecinal y reclamar diálogo y empatía a la concejal.

Riesgo para los negocios

Uno a uno, los responsables de los restaurantes Bubó, Buenas Migas, Cafè del Born, Kino, Amaya, Mesón Barceloneta, Sagarra y Taller de Tapas han expuesto los casos de sus terrazas, que cuyas reducciones ponen en peligro la continuidad de sus negocios. Los hosteleros han pedido un "cambio de actitud" a Pin, que se ha manifestado dispuesta a "estudiar" los casos. En esta línea ha sido también la intervención del portavoz del Gremi de Restauració de Barcelona, Roger Pallarols, y de la presidenta de la Associació de Veïns de la Barceloneta, Carme Piera.

En sentido contrario, el portavoz de la Asamblea Barrios por un Turismo Sostenible, Daniel Pardo, ha pedido directamente la disolución de la comisión con el argumento de que es "una farsa" porque la ordenanza de terrazas, a favor de la cual votaron todos los grupos municipales, excepto la CUP, está recurrida ante los tribunales y estos "con certeza la tumbarán". Pardo ha reclamado al gobierno municipal que reduzca el número de terrazas antes de que esto ocurra y ha asegurado que "preservar la convivencia es incompatible con las terrazas".

El discurso de Pardo ha sido suscrito por la presidenta de la Federació d'Associació de Veïns i Veïnes de Barcelona (FAVB), Ana Menéndez, y el portavoz de la CUP, Pere Casas, mientras el resto de portavoces han insistido en la necesidad de diálogo y de recuperar el consenso para encontrar soluciones.