La Shopping Night se alía con el Black Friday y potencia gastronomía y música

Concebida como una gran noche de compras y promoción comercial, era cuestión de tiempo que la Shopping Night del paseo de Gràcia afinase fechas para compartir trampolín con el Black Friday. Este jueves se celebrará por primera vez en vísperas de un viernes de descuentos, lo que aprovecharán muchos comercios para avanzar sus ofertas y atraer a más clientes. Sin perder de vista que la noche de tiendas del eje de oro de Barcelona es también una fiesta en sí misma, que este año afilará aún más dos de sus principales reclamos, la gastronomía y la música.

Durante la tarde del jueves y hasta la medianoche, más de medio centenar de participantes ofrecerán descuentos y actividades como gancho. En sinergia con la campaña navideña, de nuevo las luces de Navidad de toda la ciudad se encenderán esa tarde, dando paso a uno de los periodos de ventas más potentes del año. Lluis Sans, presidente del eje comercial, no duda de que esta confluencia de circunstancias impulsarán la Shopping Night "más potente que se ha organizado hasta el momento". 

Una vez más, son las marcas populares, del tramo inferior del paseo, las que más se vuelcan en la colorida convocatoria, mientras que son muy pocos los participantes del segmento del lujo, en el que destaca la implicación de Santa Eulalia, un establecimiento histórico y de las pocos firmas autóctonos que se mantienen en la primera línea del paseo, que este año cumple 175 años. Cada establecimiento escoge su nivel de participación: desde importantes rebajas en sus productos hasta contar con música en directo u ofrecer alguna copa de cava o detalle con el cliente.

Pero incluso sin ánimo comprador, merece la pena recorrer esa noche el vial, donde en esta ocasión se dispondrán siete escenarios para música, desde la Diagonal hasta la Gran Via. La organización, la asociación Passeig de Gràcia con el apoyo del ayuntamiento, quiere marcar el despegue de la campaña ñavideña abrazando tanto al público local como al visitante. Con ese último reto, los puntos informativos de Turismo de Barcelona distribuirán folletos en inglés y francés sobre el evento.

Más actuaciones

Las actuaciones y conciertos tendrán lugar en los cruces del paseo con Rosselló, Provença, Mallorca, València, Aragó, Consell de Cent, Diputació y Gran Via. Prometen un "recorrido a través de la historia de la música", de la música de cine al rock, pasando por revival de guateques, años 50 o ritmos latinos. En escena podrá verse a la cantante Beatriz Luengo, o a Ms Nina a ritmo de trap y reggaetón, entre otros muchos. 

La cultura y la gastronomía son otros pilares del montaje anual. En este segundo paquete destaca la propuesta de 12 restaurantes y hoteles de la zona donde se despachará un platillo de inspiración navideña junto con una cerveza a siete euros durante cuatro días. Entre ellos, algunos chefs con estrella Michelin, como Carme Ruscalleda (Mandarin Oriental) firmando una receta a base de anguila, o Nandu Jubany (Majestic) con un canelón muy especial. En el tramo bajo del paseo (por debajo de la Gran Via), volverán a alinearse 10 foodtrucks o camiones de comida.

El horario de iluminación navideña se avanza media hora, pero sin ganar horas de luz como pedía el comercio barcelonés

El montaje dará para muchos más, como un mercado de vinilos, una muestra de coches clásicos, otra de motos Harley Davidson o una temática de Elvis Presley y diversas performances.

Durante el evento, la calle ya lucirá iluminación navideña, igual que el resto de calles comerciales de la ciudad, ya que el encendido general será a las a las siete de la tarde, con un acto central del ayuntamiento en el barrio de Sant Martí de Provençals. Este año las luces se avanzan media hora para ajustarse al horario comercial y se activarán diariamente  a las seis de la tarde (hasta las 23.00 horas, excepto hasta las 00.00 los viernes y sábados), pero no se gana en horas de iluminación como habían pedido los comerciantes, pese a que los leds han reducido claramente el consumo lumínico.