TRANSPORTE PÚBLICO

El Ayuntamiento de Barcelona amnistía el autobús 192

La línea, que iba a desaparecer con la llegada de las V23 y V25, mantendrá al menos parte de su trazado tras las protestas vecinales

Protesta vecinal por la supresión del bus 192, el 28 de septiembre.

Protesta vecinal por la supresión del bus 192, el 28 de septiembre. / ÁLVARO MONGE

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El Ayuntamiento de Barcelona ha hecho marcha atrás y finalmente no suprimirá la línea de autobús 192, que debía desaparecer en las próximas semanas cuando entren en funcionamiento dos nuevas líneas de la red ortogonal de gran capacidad, las V23 y V25, que teóricamente deberían suplir las funciones del autobús que enlaza Poblenou, El Clot, Camp de l’Arpa y Guinardó. Los vecinos, especialmente del barrio del Clot, se han movilizado en las últimas semanas para reclamar el mantenimiento de una línea que conecta varios barrios con el Hospital de Sant Pau, el CAP Maragall y la Fundació Puigvert y que utilizan muchos usuarios con movilidad reducida.

En el plenario del distrito de Sant Martí del pasado miércoles, el Gobierno municipal informó a los vecinos que protestaban por el cierre y a los grupos municipales (ERC, PSC y PDeCat) que presentaron iniciativas al respecto, que “se ha cambiado el criterio” y que, después de que el distrito ya reconociese las consecuencias negativas del cierre hace un año, finalmente el área de movilidad también ha asumido la continuidad de la línea.

Sin embargo, aunque está clara la continuidad del 192 desde la calle Aragó, en el Clot, hasta el Guinardó, con coches de 80 plazas y tres para sillas de ruedas, en lugar de 60 plazas y una silla de ruedas, es improbable el mantenimiento del tramo que va del Clot a Poblenou. Según se informó a los vecinos en el pleno, el 85% del millar de pasajeros diario de la línea solo utiliza el tramo por encima de Aragó, y su utilización desde el Poblenou es muy reducida. De la misma forma, según argumentó el portavoz de Barcelona en Comú en el distrito, Francesc Carmona, la nueva línea V23, cuyo trazado se ha modificado para que tenga una parada en Sant Pau, ya uniría Poblenou, por la calle Badajoz y Cartagena, con el hospital de Sant Pau, con una frecuencia de paso de 8 minutos, rampa, una velocidad de servicio superior y más capacidad. Precisamente, otra de las reivindicaciones de los usuarios era ampliar el espacio destinado a sillas de ruedas, insuficiente en los buses que utiliza actualmente la línea 192. El ayuntamiento, frente a las quejas vecinales, recuerda que tres líneas verticales (las V23, V25 y V27, esta última ya en servicio) garantizan la conectividad en dirección mar-montaña en un área que anteriormente solo estaba cubierta por el 192.

Se sigue reclamando el trayecto íntegro

Los vecinos, no obstante, siguen reclamando el mantenimiento de la línea en su integridad, ya que existen también vecinos de Poblenou, y en concreto de las residencias de ancianos Pere Relats, que son atendidos en Sant Pau. Una de las vecinas que reclamaron el mantenimiento de la línea en el plenario del distrito, Irene Silvestre, insistió en que la línea a debate “es utilizada básicamente por personas mayores con enfermedades crónicas, por ciudadanos con problemas de movilidad, y el recorrido de la línea les permite llegar a varios centros de salud de manera más rápida y más cómoda, sin necesidad de ir cambiando de autobuses”. Miquel Figueres, de la vocalía de personas con diversidad funcional de la Associació de Veïns de Sant Martí, insiste en que en la zona de la Gran Via, que quedaría lejos del V23 y no la cubriría un 192 con un recorrido recortado, hay muchas personas con movilidad reducida que son atendidos en Sant Pau y siguen necesitando un transporte público que les deje “en la puerta del hospital”.

Por su parte, Miquel Catasús, de la Associació de Veïns del Clot-Camp de l’Arpa, recuerda que en el despliegue de las líneas de autobús de la red ortogonal ya se ha visto en otros barrios que “las líneas que comunican con hospitales necesitan un tratamiento especial” y que se ha demostrado la necesidad de mantener una veintena de líneas de autobuses de barrio para complementar la red de alta capacidad.

La línea 192 tiene una larga historia. Es heredera del bus 92, que a su vez sucedió a un servicio privado, La Catalana (nombre que sus usuarios mantuvieron), que desde antes de la anexión de Sant Martí ya conectaba los diversos núcleos del antiguo municipio (Poblenou, Clot y Camp de l’Arpa).