inauguradas hace 15 días

Barcelona cierra las fuentes del parque de Santiburcio, en Sant Andreu, por un brote de gastroenteritis

La Agència de Salut Pública analiza el agua tras registrarse 12 incidencias de problemas gástricos en niños del vecindario

Fuentes Santiburcio

Fuentes Santiburcio

El Periódico

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dos semanas después de que fueran inauguradas, el Ayuntamiento de Barcelona ha ordenado este jueves clausurar las fuentes del parque de Antoni Santiburcio, en los antiguos cuarteles de Sant Andreu, tras haberse registrado un brote de gastroenteritis en niños que habían estado jugando en la zona. En concreto, según fuentes municipales, se han registrado 12 incidencias por afectación gástrica, todas ellas de carácter leve.

Varios padres han alertado a través de las redes sociales del brote de gastroenteritis, que también ha provocado erupciones cutáneas en algunos pequeños. La Agència de Salut Pública de Barcelona ha tomado ya cartas en el asunto y analizará el agua de las fuentes para investigar si está vinculada con el brote de gastroenteritis. En todo caso, han confirmado fuentes del consistorio, el agua es potable y procede de la red de abastecimiento urbano.

Está previsto, y no se ha modificado la planificación, que el próximo martes se celebre una fiesta de inauguración de las mismas fuentes, e incluso se invita a los ciudadanos a acudir con bañador. Hasta ahora más de un millar de niños ha visitado el parque, según el ayuntamiento.

Las fuentes constan de 13 canales que tienen 234 surtidores, concebidos como un espacio de ocio en el parque de 12.000 metros cuadrados. Fueron inauguradas el pasado día 13 de agosto por la teniente de alcalde de Derechos Sociales y concejal de Sant Andreu, Laia Ortiz, y ocupan una parte de los antiguos cuarteles.

Primera parte de las obras

Este recinto es la primera actuación de urbanización de los cuarteles de Sant Andreu, que está en fase de obras desde que en diciembre del 2015 se firmara el acuerdo entre el ayuntamiento y el Consorcio de la Zona Franca.

Las fuentes están controladas desde el Centro de Control de Barcelona Ciclo del Agua (BCASA) y cuentan con iluminación led en cada surtidor para poder hacer juegos de luz y agua en horarios concretos. Además, el parque tiene espacios de árboles y explanadas verdes.

La inversión en la primera fase de construcción del parque ha ascendido a 3,2 millones de euros y la segunda fase, prevista para el 2019, tiene un presupuesto de 2,5 millones de euros más.

El parque dedicado al exconcejal de urbanismo ya fue objeto de problemas recientemente porque las obras provocaban la inundación sistemática del parking de una finca contigua, según denunciaban los vecinos.