La oposición pide cuentas a Colau sobre las inversiones

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se enfrentará este viernes a un pleno extraordinario centrado en la gestión que el gobierno hace de las inversiones y en la posibilidad de que una potencial caída de ingresos, especialmente del impuesto de plusvalías, acabe obligado al consistorio a anular actuaciones ya previstas, es decir, a practicar recortes. La oposición, con el PSC, exsocio reciente de Colau, cuestiona desde hace días la previsión del gobierno. Los socialistas fueron los primeros en denunciar un plan de recorte de 107 millones de euros en inversiones del 2018 y el 2019, del que el gobierno de Colau precisó que responde a una proyección de ingresos hecha en otoño, cuando la previsión es que el ingreso por las plusvalías cayera un 40%, y agregó que en la actualidad esa previsión se ha reducido hasta el 12%.

Los grupos solicitaron entonces a Colau que enseñara el papel que resume el recorte que debería practicarse con la previsión actual. Por boca del primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, y de la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, el gobierno negó que haya recorte previsto alguno. Como mucho, dijo Pisarello, podría haber una reprogramación de calendario.

Reprobación y comisión

El pleno extraordinario sobre inversiones tendrá apenas una hora larga de duración. Lo pidieron inicialmente el PSC, ERC y el PDECat, y también querían hacerlo el PP y Ciutadans y el PSC, pero los socialistas no podían figurar en dos peticiones de este tipo. En todo caso, la oposición en bloque, con intensidad variable, pregunta por el tema, porque incluso la CUP pide ahora claridad, aunque llama a no sumarse al “alarmismo” que achaca a otros partidos.

El texto que se someterá a debate y votación insta a "lamentar la falta de previsión y transparencia del gobierno municipal así como la mala gestión de los recursos del ayuntamiento, hecho que puede comportar el recorte de inversiones en equipamientos, servicios y proyectos municipales". Reclama al gobierno que informe "sobre el detalle de las partidas que deberán recortarse" y aboga por crear una comisión no permanente de estudio para el seguimiento de las inversiones previstas.

En el mismo pleno, el PSC y Ciutadans solicitarán la reprobación de Colau por la gestión de las inversiones. Es de prever que tanto la comisión como la reprobación acaben recibiendo la luz verde. La alcaldesa ya fue reprobada en abril por su gestión del caso de los narcopisos. En cuanto a la comisión, podría convertirse en un azote del gobierno en meses de precampaña. En definitiva, se trata de un pulso sobre la capacidad del gobierno de Colau de gestionar sus recursos.