El Aeropuerto de El Prat ya cobra por parar ante la T-1 a dejar o recoger viajeros

El Aeropuerto de El Prat ha instalado un nuevo sistema de estacionamiento de pago en la acera que hay justo en frente de la Terminal 1. El 'Pàrquing exprés T-1' pretende agilizar la circulación de coches y aumentar el control de vehículos, según Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), que hasta ahora no cobraba por parar el coche en esa zona habilitada para dejar y recoger viajeros. El método lleva en funcionamiento desde el pasado viernes y ofrece 15 minutos de estacionamiento gratuitos. La gestora aeroportuaria tiene planeado expandir este sistema al resto de terminales después de considerar que su implantación en València, Ámsterdam y Londres ha sido un éxito.

El funcionamiento del sistema es parecido al de un párking común y corriente: se recoge el tíquet después de traspasar la barrera de la entrada y el conductor deberá pagar o no, dependiendo de cuanto tiempo haya estado estacionado, al pasar su tiquet por la barrera de salida. Fuentes de AENA aseguran que la introducción del pago agiliza el tráfico de coches que vienen a recoger o a dejar pasajeros. "El objetivo no es que la gente pague, sino hacer que el tránsito de vehículos sea más fluido. Lo más importante es que así también tenemos controlados a los coches que entran y salen de la terminal. Es un tema de seguridad y de regular la circulación".

Primeras impresiones

El flujo de usuarios no parece haber disminuido en absoluto. La fachada de la T-1 sigue con decenas de coches que aguardan la llegada de pasajeros. Narciso India es un comercial que espera en el nuevo 'pàrquing exprés'. "El problema que hemos visto es que las colas a la entrada son interminables. A la salida no hay ningún problema, pero al entrar es horrible. Eso sí, los coches siguen viniendo porque hay un montón", comenta India. 

Un usuario lamenta que es más caro que el párking tradicional

El nuevo estacionamiento no ha afectado en nada a la distribución de la parada. Se ha instalado una máquina al principio para retirar el tíquet y otra, al final, para salir. "Es un poco lioso porque no sabemos si debemos pasar por la maquinita o no sin haber sobrepasado los 15 minutos", explica Tome. Para abonar la cantidad necesaria se han dispuesto varios métodos de pago a lo largo del nuevo párking, en metálico, monedas o billetes, y con tarjeta,  a través del sistema 'contactless' o insertándola en la ranura.

"Los autobuses y los taxis continúan con su espacio reservado. Ellos irán por su carril", explican fuentes de AENA. Mientras ayude a la rápida circulación, los usuarios del aeropuerto lo ven con buenos ojos. "A veces he venido y había muchísimos coches a las cinco de la mañana, eso no es normal. A lo mejor sí que da resultado. Ahora tengo que descubrir si dan un margen de salida después de pagar", concluye Tome.