POR LOS DERECHOS DE INMIGRANTES Y 'SINPAPELES'

Los encerrados en la Massana piden despenalizar la venta ambulante

El padrón sin restricciones o el establecimiento de cuotas para contratar 'sin papeles', entre las reivindicaciones al Ayuntamiento

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Los representantes de los migrantes encerrados en la escuela Massana. en el barrio del Raval de Barcelona, han reclamado por carta a las administraciones iniciar contactos para una posible negociación que permita solucionar el conflicto. El padrón sin restricciones, la despenalización de la venta ambulante y el fin de la persecución policial, ampliar los contratos para personas sin papeles y flexibilizar la reagrupación familiar, son algunas de las reivindicaciones que se han hecho llegar al Ayuntamiento de Barcelona.

Los representantes de la acción en la escuela Massana piden, entre otras cosas, el empadronamiento de las personas sin ningún tipo de documentación mediante la huella dactilar y una declaración institucional del ayuntamiento sobre el derecho universal al padrón.

La despenalización de la venta ambulante y la retirada de los antecedentes penales y policiales son dos peticiones que el colectivo emite en el ámbito de los manteros. Añaden el final de las multas administrativas y judiciales, y la eliminación de las denuncias falsas, así como frenar la persecución “policial brutal y salvaje” de quienes, dicen, “nos rompen las piernas, los brazos y nos matan”.

Los impulsores del encierro proponen, además, establecer una cuota de contratación para personas sin papeles en las empresas municipales, siempre que estas personas cumplan las condiciones requeridas para el puesto de trabajo. La misma cuota la proponen también para los cursos de formación que impulsa el ayuntamiento.

En la misma línea, se pide formación en lengua castellana accesible, con financiación municipal, para facilitar el acceso a la nacionalidad de los inmigrantes.

En lo que refiere a los refugiados, los representantes del encierre en la Massana piden un aumento de personal y dotación económica para el SAIER y garantía de acogida mientras dure la espera de la primera cita.

En materia de reagrupación familiar, los representantes piden flexibilizar los requisitos aplicados a la vivienda y su eliminación en el caso de los menores de edad.

Para luchar contra el racismo, los inmigrantes y los refugiados que impulsan el encierro piden establecer un protocolo antirracista de obligado cumplimiento para los servicios públicos, la contratación de trabajadores, la actuación policial y los servicios sociales.