COMISIÓN ESPECIAL

El comercio critica la gestión de Colau de la actividad económica

zentauroepp40009488 comercio180124210430

zentauroepp40009488 comercio180124210430 / periodico

Patricia Castán

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La relación entre los agentes económicos de la ciudad y el equipo de gobierno de Ada Colau ha sido tensa todo el mandato, pero hoy ha sido el sector del comercio quien ha aprovechado la celebración de una comisión especial para lanzar importantes reproches a su gestión. En la lista de críticas destacan dos: la falta de soluciones para el problema del top manta, y la ausencia de promoción económica de la ciudad para contrarrestar los efectos (encadenados) del atentado terrorista del pasado agosto y del conflicto político que vive Catalunya.

La comisión no permanente de estudio de la situación económica de Barcelona ha celebrado su primera sesión de trabajo. La iniciativa fue impulsada en noviembre por Jaume Collboni (PSC) con el objetivo de impulsar medidas extraordinarias para los sectores económicos. El encuentro de hoy contaba con 13 representantes del comercio, la restauración y la moda. La presidenta de la comisión es Sònia Recasens, del grupo Demòcrata.

El ayuntamiento ha explicado que a finales del 2017 empleaba a 151.368 personas, lo que supone el 14,4% del empleo en la ciudad. La facturación el año pasado fue de 35.706 millones de euros, con un incremento del 2,6% que supone la mejor evolución de los últimos años, tras el periodo negro de la crisis económica. El concejal Agustí Colom ha anunciado que se creará un observatorio para analizar tendencias y datos del sector.

Críticas repetidas

Pero la mejor coyuntura económica no ha evitado que los representantes sectoriales hayan criticado la gestión del consistorio.  Desde el Consell de Gremis, Pimec y Amics de la Rambla, entre otros, han lamentado en su turno de palabra la mala gestión del tema del top manta. También, como en Barcelona Oberta, ha habido quejas por la falta de diálogo y de promoción de la ciudad. El sector de la restauración ha lamentado que Barcelona se esté quedando atrás gastronómicamente y su gremio ha pedido la dimisión de la concejala de Ciutat Vella, Gala Pin, quien el jueves opinó que este sector estaba mal representado. 

La socialista Montse Ballarín ha reivindicado 10 millones de euros para impulsar las peticiones que salgan de la comisión, que en próximos encuentros contará con el sector turístico.