HISTORIAS OLVIDADAS

Las primeras que dijeron basta

En 1918 una huelga de mujeres paralizó Barcelona en protesta por los precios del carbón y de los alquileres

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Merece una lectura minuciosa, más que nunca tras lo sucedido en la ciudad el pasado jueves, 8 de marzo, el número seis de la colección Històries del Raval, 'La Revuelta de las Mujeres' (Barcelona, 1918). En 58 páginas -disponibles en el Lokal al precio de tres euros-, Toni Àlvaro documenta una huelga hasta ahora prácticamente desconocida, como mínimo para la mayoría.

Los ingentes beneficios provocados por la neutralidad española durante la primera guerra mundial no habían repercutido en los salarios de los trabajadores. Los jornales estaban congelados desde el inicio del conflicto armado, las cosechas y el carbón se exportaban e intermediarios y comerciantes acaparaban y especulaban con los productos básicos. El invierno era riguroso en Barcelona, el carbón escaseaba y la ciudad entraba en una espiral de precios al alza, que arrastraba alimentos y alquileres. Los hogares de las familias barcelonesas no conseguían asegurar la subsistencia y las mujeres, organizadas en las conversaciones en las colas para obtener los productos básicos, deciden plantarse. Y lo hacen.

También en Málaga y Valencia

Álvaro rescata unos hechos de empoderamiento colectivo olvidados tanto por la historiografía académica como por la militante, ahora rescatada. Una huelga que llegó a paralizar más de 300 fábricas y a ser seguida por más de 30.000 mujeres.

En paralelo, en Málaga y Valencia, huelgas de mujeres en idéntico contexto y con idénticos objetivos.