BATALLA CONTRA LAS VTC

El taxi se centra ahora en el puerto, el aeropuerto y las estaciones de tren

El sector descarta la huelga indefinida y se movilizará a partir de enero contra las infraestructuras de Fomento

Manifestación de taxistas en Madrid.

Manifestación de taxistas en Madrid. / periodico

Carlos Márquez Daniel

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Después de casi un año de batalla contra las licencias de alquiler de vehículos con conductor, conocidas como VTC, el sector del taxi de Barcelona se ha replegado para decidir su hoja de ruta de cara al 2018. Como el sentir no era unánime, el gremio decidió convocar este lunes una consulta entre los taxistas. Se presentaron cuatro opciones, desde no hacer nada hasta la huelga indefinida. Venció el término medio

Votaron 1.905 conductores de un total de 10.523 licencias y cerca de 13.000 taxistas (algunos vehículos funcionan a doble turno). Venció la opción número dos con 1.000 votos (52,5% del total), lo que significa que a partir de enero se organizarán "movilizaciones selectivas en infraestructuras del Ministerio de Fomento", esto es, puerto (mercancías y pasajeros), aeropuerto y estaciones de tren. Le siguió la propuesta de mantener manifestaciones puntuales "consensuadas con el sector" (544 votos), lo que hubiera supuesto mantener la protesta tal y como se ha desarrollado en el 2017, con paros puntuales. En tercer lugar, la alternativa más radical: huelga indefinida, con 111 apoyos. 

Pendientes del TSJC

A través de un comunicado, Elite Taxi, la asociación mayoritaria del sector, anuncia que el gremio alzará la voz "hasta que Fomento se dé por aludido y cree la mesa de negociación para diferenciar, de una vez por todas, a dos sectores que han convivido durante tantos años". Los conductores reclaman al Gobierno que haga cumplir la proporción de 30 taxis por cada VTC. Ese porcentaje peligra, ya que cerca de 3.000 de estas licencias están pendientes de ser aprobadas por el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. En este sentido, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se comprometió la semana pasada a impulsar un reglamento mediante el cual los VTC requieran una autorización para circular por el territorio metropolitano, complementario a la licencia, que no depende del Ayuntamiento.