BARCELONEANDO

Pociones de amor a tres euros

Harry Potter saldría de aquí con la Visa temblando. Es la BCN PotterCon, una convención dedicada al mago más peliculero. Las 2.000 entradas se agotaron en cuatro días

Barceloneando Harry Potter

Barceloneando Harry Potter / periodico

Ana Sanchez

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Amortentia”, informa la etiqueta. Es la poción de amor más fuerte del mundo, te dicen con tono de obviedad. ¿Esto lo saben los de ‘Sálvame deluxe’? Mueves el botecito de cristal con la veteranía que da haber visto más de cinco películas de brujas. El líquido rosa nacarado reluce con deje de encantamiento de principiante. Es tuya por 3 euros.

Harry Potter saldría de aquí con la Visa temblando. Se venden brebajes multijugos, escobas con forma aerodinámica, gafas redondas al por mayor. “Adopta un elfo”, se lee en algún cartel. Cinco minutos más y te entra la necesidad de comprarte una varita mágica. Todo el que te cruzas lleva una en la mano. Mira, esta parece buena: es de roble con “núcleo de bigotes de troll”, pone. Te la venden con funda, como las armas. Hasta puedes encontrar ligeros portavaritas.

Aquí se venden escobas con forma aerodinámica, brebajes multijugos, gafas redondas al por mayor, hasta ligeros portavaritas

Es el edificio histórico de la Universidad de Barcelona. Hoy parece más bien el colegio Hogwarts, el internado de magos ideado por J. K. Rowling. Se ven más criaturas mágicas por metro cuadrado que en ‘Cuarto milenio’. De aquí para allá, una riera de gente con varita, túnica negra, bufanda a rayas, la mayoría amarillas y granates, las del uniforme de Harry Potter. Hasta jurarás que oyes las voces del aprendiz de mago y Hermione, su mejor amiga de la saga. Lo son. También están por aquí los dobladores de las películas.

Un Disneylandia de magos y brujas

Es la BCN PotterCon. El pasado fin de semana se celebró la segunda edición de esta convención dedicada al universo de Harry Potter. Un Disneylandia de magos y brujas. El aforo llevaba semanas completo. Las entradas (2.000, 1.000 por día) se agotaron en apenas cuatro días. El programa incluía mercadillo mágico, talleres para hacer tu propia varita, cursillos de defensa contra las artes oscuras e incluso conferencias sobre estudios de género. Hasta se vieron lechuzas de verdad, como las de las películas. De hecho, el dinero de la rifa fue a parar a una asociación de recuperación de lechuzas: Acariciando el Aire

“En Barcelona hay mucho movimiento -asegura Sofía-, mucha gente a la que le gusta”. Sofía es una de las organizadoras de BCN PotterCon. Así se llama también la asociación de seguidores de Harry Potter de Barcelona. Lleva tres años organizando eventos con varita. Cada primer fin de semana de septiembre inician el curso escolar como los alumnos de Hogwarts: en una estación. En vez de ir al andén 9 y 3/4 de King's Cross, de donde sale el expreso oficial al colegio de magos, los aprendices de Barcelona quedan entre el andén 9 y 10 de la estación de França.

Sofía se quita el gorro de bruja un momento. Hoy va vestida de magizoóloga. “Tengo mi ‘pygmy puff’ en el bolso”, dice como si hablara de la cartera. Saca una bola amarilla de pelo con la mirada del gato de ‘Shrek’. “Tenía alguna criatura más, pero las he ido perdiendo”, se ríe.

"Un fenómenos transgerenacional"

¿Qué tiene Harry Potter? “Es un fenómeno muy transgeneracional –responde Sofía-. Muchos de los que empezamos a leer a Harry Potter ya somos treintañeros”. Desde la primera novela (1997), han aparecido otros seis libros, ocho películas, videojuegos, parques temáticos, incluso un nuevo género músical: wizard rock. La última edición de la saga –en formato teatral- se puede ver en el West End londinense. Las entradas están agotadas hasta el 21 de octubre del 2018. “Es un fenómeno que sigue muy fresco –añade Sofía-. Ahora, por ejemplo, ha salido la saga de cine de ‘Animales fantásticos’, que no es Harry Potter, pero sí es el mundo de J. K. Rowling”.

Esta semana se celebra la Copa de España de quidditch. Se juega, como en la saga de Potter, montado en una escoba 

En el patio se puede probar el quidditch, el deporte mágico oficial que en la saga se juega sobre escobas voladoras. Este es quidditch ‘muggle’, especifican. (‘Muggle’ = humanos sin habilidades mágicas). Aquí los aros están a una altura asumible sin varita. Se juega la copa de España esta semana, explica Willy con normalidad futbolera. Su equipo, el Barcelona Eagles, lleva entrenando con escobas entre las piernas desde el 2013. “Habrá 30 y pico equipos en España –calcula -. Cuatro en Catalunya”.

¿Lo más mágico que se puede hacer aquí? “Te puedes casar”, responde Sofía. En el vestíbulo hay un arco con flores, como los de las pelis americanas, donde te dan foto Polaroid y certificado. “Es un poco Las Vegas –se ríe Sofía-. Lo que pasa en BCN PotterCon se queda en BCN PotterCon”.