Revuelta en la Sagrada Família por la supresión de nueve terrazas

El conflicto de las terrazas de bares y restaurantes en Barcelona acaba de generar una nueva trinchera en la Sagrada Família, donde el ayuntamiento va a eliminar nueve terrazas en Mallorca, València y Aragó con Marina que suman 49 mesas y 196 sillas para ganar espacio de paso para los visitantes del templo. La enorme afluencia de turistas en la zona ha llevado al distrito del Eixample a revocar esas licencias, lo que ha puesto en pie de guerra al colectivo, en plena temporada alta.

El año pasado el consistorio anunció medidas para esponjar la zona, calificada como singular y con normas diferentes a la ordenanza genérica. Se apostó por bajar algunas terrazas a la calzada (y se probó con un plan piloto) y por eliminar algunos veladores. Pero luego llegó la tregua con el sector de la restauración y el acuerdo para trabajar en una modificación consensuada de la ordenanza de terrazas, con lo que el colectivo afectado pensaba que los cambios no se harían efectivos hasta que finalizase la negociación para toda la ciudad.

Sin embargo, el ayuntamiento notificó hace un mes a nueve operadores que tendrían que retirar sus terrazas este mismo verano para liberar espacio público. El colectivo presentó alegaciones, pero los representantes municipales citaron el pasado miércoles a los titulares de los negocios para comunicar la desestimación masiva de estas y "forzar la entrega de la notificación oficial que supondría la extinción de las licencias de terraza" inmediatamente, explican en la patronal.

GANAR TIEMPO

Los restauradores se negaron a firmarlas y exigieron recibirlas por los canales ordinarios, en los próximos días, ganando así algo de tiempo. El siguiente paso, una vez las reciban, será presentar recursos de alzada pidiendo la suspensión cautelar de la medida. Roger Pallarols, director del gremio, considera "incoherente" imponer el recorte en plena negociación de las normativas, y reclama una "rectificación". También aduce que las ordenaciones singulares están pensadas para paseos, ramblas o plazas con carácter especial y que la Sagrada Família no formaba parte del pack. "Vieron que la ordenanza general no reducía las terrazas lo bastante y crearon la zona especial, más gravosa".

Fuentes municipales replican que la norma para la zona se aprobó en abril y ya tiene carácter ejecutivo, con el objetivo de resolver "las disfunciones provocadas en el espacio público por el uso intensivo por parte de los visitantes". El ayuntamiento decidirá sobre el recurso de alzada cuando se produzca.

Afectados como Jose Antonio Sánchez, de Xamfrà Gaudí, se quejan de la notificación sin previo diálogo y en plena temporada. Aducen que tendrán que eliminar puestos de trabajo.