Colau elige al biólogo Sito Alarcón para pilotar el futuro Zoo de Barcelona

El nuevo director llega con la recuperación del Besòs y de los fondos marinos de la ciudad en su currículo

cmontanyes33225398 delfines170321191228

cmontanyes33225398 delfines170321191228 / periodico

CARLES COLS / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Ada Colau ha elegido ya al Teseo que la sacará, o eso espera, del laberinto en el que se metió el Ayuntamiento de Barcelona cuando decidió someter el futuro del zoo a un proceso participativo. Según ha podido saber EL PERIÓDICO, Sito Alarcón, un biólogo con una sólida trayectoria profesional, será el próximo director del Zoo de Barcelona. Llegará a su nuevo despacho con la carpeta de tareas pendientes llena a rebosar. Por ejemplo, encontrar una salida viable a los cuatro delfines que aún viven en el parque animalista de la Ciutadella después de que una de las conclusiones del proceso participativo fuera precisamente desdeñar la opción de construir  un delfinario mayor, acorde con las exigencias de la Asociación Europea de Mamíferos Acuáticos, y que, por lo tanto, decidir que hay que buscarles un nuevo hogar.

Alarcón es, de entrada, biólogo de formación académica, una condición probablemente indispensable para aterrizar con buen pie en el zoo hoy en día, un avispero tras el proceso participativo, ya que sentó muy mal entre los trabajadores del recinto que en las primeras reuniones que organizó Sanz, la mayoría de las voces invitadas fueran de grupos animalistas, partidarios, en algunos casos, directamente del cierre de las instalaciones por considerarlas decimonónicas.

La mano del futuro nuevo director del zoo (la decisión está previsto que se anuncie en breve) está presente en muchos de los proyectos medioambientales de la ciudad, a través de los cargos que ha desempeñado en el Área Metropolitana de Barcelona, en el Consorci del Besòs y en Barcelona Regional. Colideró el saneamiento de los ríos Besòs y Llobregat y, en el 2004, puso en marcha uno de esos proyectos que a menudo se olvidan porque no están a la vista. Coordinó la instalación de arrecifes submarinos frente a las playas de Barcelona, donde desde entonces crece, pese al entorno, la vida acuática.

EXPERTO EN ZOOS

Sin embargo, cara a su nueva etapa profesional, el apartado más interesante de su currículo tal vez sea que fue el encargado de proyectar los distintos planes de traslado del Zoo de Barcelona que se estudiaron bajo la etapa de Joan Clos como alcalde. Ninguno se ejecutó, pero aquel encargo le permitió conocer de primera mano la arquitectura y la gestión de un buen número de zoológicos del mundo. Así, no llegará a su nuevo puesto de responsabilidad sin cimientos, algo indispensable, porque la situación (explica una de las fuentes consultadas) tiene similitudes con el llamado motín del Hesperia del Barça. Los trabajadores más veteranos y reputados del parque se quejan de que el recinto es gestionado como una empresa municipal más, donde lo prioritario es la cuenta de resultados. Queda por ver si Alarcón tiene los mimbres para ser el Cruyff que necesita el zoo.

En cualquier caso, antes de su llegada, el propio equipo de la concejala Sanz ya se ha esforzado por desactivar algunas de las minas que quedaron esparcidas con el proceso participativo. Uno de las crisis más graves de aquel trabajo colectivo tuvo lugar cuando el mayor experto de España en cetáceos, Àlex Aguilar, abandonó las sesiones con una durísima carta dirigida a Sanz porque, en su opinión y entre otras razones, algunas de las salidas que se proponían para los delfines eran disparatadas. Los grupos animalistas insistían en buscar para esos animales una santuario en aguas griegas. Recientemente, según fuentes del grupo de trabajo, el Ayuntamiento de Barcelona organizó un viaje a Grecia al que llevó a miembros de esos grupos animalistas. El propósito, añaden esas fuentes, era poner a esos ecologistas cara a cara ante la imposibilidad de ejecutar aquel plan. Alarcón deberá ahora gestionar las posibles alternativas.