BCN inicia con la plaza de los Països Catalans la protección de espacios públicos modernos

icoy36445614 parques161130190659

icoy36445614 parques161130190659 / DANNY CAMINAL

CRISTINA SAVALL / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El pleno del consejo municipal del Ayuntamiento de Barcelona ha acordado reconocer el valor ciudadano, cultural y social de la arquitectura moderna, que ha tenido un papel clave en la transformación de la ciudad y en la creación de espacios y equipamientos ciudadanos "de excelencia" por su diseño y su aplicación urbanística. La primera en ser catalogada y protegida será la plaza de los Països Catalans (1981-1983), que ya se está inventariando para iniciar la recuperación y mejora de esta obra de Albert Viaplana (Barcelona, 1933-2014) y Helio Piñón (Castellón, 1942), que revolucionó, no sin rechazo ciudadano, la manera de entender el espacio público delante de la estación de Sants.

"A iniciativa del PSC, esta plaza se transformará en un bien de especial protección, una vez concensuda su rehabilitación con los vecinos de forma que sea compatible con la preservación de sus valores emblemáticos y simbólicos, como espacio público y como umbral urbano de puerta de entrada a la ciudad", expone Daniel Mòdol, concejal de Arquitectura, Paisaje Urbano y Patrimonio. El proyecto pasa, según el edil, por conseguir la mejor integración en la última fase de remodelación de la avenida de Roma y de la necesaria metamorfosis del degradado entorno de la estación de ferrocarriles y de la de autobuses. "Debemos mejorar la accesibilidad", declara.

LA SILUETA DE UN GATO

La de los Països Catalans, premio FAD de 1984, fue el modelo de las nuevas áreas peatonales de cemento sin vegetación, conocidas como plazas duras, promovidas en los años 80 por el ayuntamiento socialista, que en sus primeros días cosecharon críticas por su minimalismo y sequedad. En la de Viaplana y Piñón destacan dos grandes cubiertas de plancha de cobre y la silueta de un gato.

Actualmente, la restauración total del entorno de la estación de Sants y su financiación están pendientes de un acuerdo entre el ayuntamiento y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que depende del Ministerio de Fomento. "Ahora, al estar catalogada como bien de especial protección, el consistorio podrá imponer a Adif que la plaza recupere su estado original", asegura Mòdol, en referencia a que hasta hoy solo se han realizado actuaciones de mejora provisionales. "Pero aún quedan esas espantosas salidas de emergencia alineadas a nivel del suelo", recuerda el urbanista, que quiere recuperar "el espíritu" de una plaza que, opina, se avanzó a su tiempo.

{"zeta-legacy-destacado":{"strong":"\"El\u00a0espacio\u00a0p\u00fablico","text":"est\u00e1 expuesto al exceso de turistas, terrazas y motos aparcadas\", lamenta M\u00f2dol"}}

El gran objetivo de Mòdol es proteger espacios públicos contemporáneos de gran interés urbanístico e igualarlos a lugares patrimoniales tan emblemáticos como el parque Güell, el conjunto del parque de la CiutadellaMontjuïc y el laberinto de Horta. "Debemos velar por el espacio público, el bien más preciado de los barceloneses y a su vez limitado y poco cuidado por la sobrepresión a que está expuesto por culpa del exceso de turistas, de terrazas y de motos aparcadas", declara.

A la catalogación y proteccón patrimonial de la plaza de los Països Catalans le seguirán, según el proyecto de Mòdol, el Moll de la Fusta y los parques de Diagonal MarCentral de Nou Barris y de la Creueta del Coll.

OASIS EN LA CIUDAD

El de Nou Barris, cuya construcción comenzó en 1999, es el segundo espacio verde de la ciudad en superficie, con casi 17 hectáreas con lagos con cascadas y más de mil árboles de 49 especies diferentes, así como un palmeral único en la ciudad. Dentro de su área se encuentra el antiguo Institut Mental de la Santa Creu, abierto hasta 1986, que actualmente alberga la sede del distrito y otros espacios cívicos como la biblioteca. La gran obra de los arquitectos Carme Fiol Andreu Arriolla es un lugar muy apreciado por los vecinos de los barrios con los que limita: Can Peguera, Guineueta, Turó de la Peira y Porta.

El parque de La Creueta del Coll se encuentra en el distrito de Gràcia, donde antiguamente había una cantera de piedra granítica. Su transformación en parque público se realizó en 1987 gracias a un proyecto del estudio Martorell-Bohigas-Mackay. La entrada principal es por el paseo de la Mare de Déu del Coll, donde se encuentra el monolito de hierro llamado 'Tótem', de Ellsworth Kelly. Hay una piscina situada entre las paredes de la antigua pedrera, donde muchos visitantes van a contemplar el 'Elogio del agua', una escultura de hormigón de Eduardo Chillida de 54 toneladas, que en 1998 causó tres heridos al desprenderse de los cables de acero anclados en la roca.

La rehabilitación del sector portuario barcelonés comenzó con el proyecto urbano del Moll de Bosch i Alsina, o Moll de la Fusta, paseo con palmeras y una amplia terraza elevada, obra de Manuel de Solà-Morales. Esa zona clave en la transformación del frente marítimo previa a los JJOO de Barcelona'92  fue hasta mediados del siglo XX el lugar donde se almacenaba la madera antes de ser embarcada.

{"zeta-legacy-despiece-horizontal":{"title":"Proyecto para\u00a0proteger las islas de las manzanas","text":"El proyecto del arquitecto\u00a0Daniel M\u00f2dol, concejal\u00a0de Arquitectura, Paisaje Urbano y Patrimonio, es iniciar el inventario del estado de estas islas para que tambi\u00e9n sean catalogadas como espacios patrimoniales. Las dos primeras en estudiarse tienen referencias literarias:\u00a0los jardines del interior de isla\u00a0de\u00a0Montserrat Roig, con entrada en\u00a0Rocafort, 226,\u00a0y los de\u00a0Manuel de Pedrolo, ubicados en\u00a0en el interior de manzana limitado por las calles\u00a0Lepanto, Diputaci\u00f3 y\u00a0Marina."}}