Barcelona da 10 días al okupa convergente para que devuelva las llaves del piso

Joan Figuerola Borras

Joan Figuerola Borras / periodico

TONI SUST / BARCELONA

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El Ayuntamiento de Barcelona ha desestimado las alegaciones presentadas por el consejero de distrito de CiU en Sarrià-Sant Gervasi Joan Figuerola Borràs contra el expediente que se le abrió por ocupar ilegalmente el piso contiguo al suyo, en el inmueble situado en el número 12 de la calle de Isaac Albéniz, en el que reside. El consistorio da a Figuerola, cuyo caso destapó EL PERIÓDICO el 9 de mayo, diez días naturales para que deje de usar la vivienda y entregue las llaves.

El periodo empezará a contar cuando reciba oficialmente la comunicación de que sus argumentos no han convencido a la Administración municipal, que no duda de que Figuerola entró en la vivienda, el 4º 1ª (él vive en el 4º 2ª), aunque ahora él lo niegue. Si transcurrido ese tiempo no ha entregado las llaves, el consistorio acudirá a la vía judicial. Figuerola aún puede recurrir la decisión municipal, lo que retrasaría el desenlace.

El expediente municipal va contra Figuerola y contra su hijo, pero solo el padre presentó alegaciones, que pivotaron sobre una afirmación: el consejero de distrito aseguró al consistorio que nunca ha dispuesto del 4º 1º. Pero el ayuntamiento considera un hecho irrefutable que sí lo hizo y que cambió la cerradura, y se ampara en un informe de la Guardia Urbana y en los servicios sociales para constatar la ocupación.

Según el informe de desestimación de las alegaciones de Figuerola, fue él mismo quien informó a los agentes de la policía local de que había ocupado el 4º 1ª cuando esta vivienda quedó vacía cinco años atrás, tras fallecer los inquilinos que vivían allí. Argumentó que su hijo se había quedado sin trabajo. Las alegaciones, subraya el ayuntamiento, no desvirtúan el “principio de veracidad que inviste a los agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones”. El hecho de que tuviera las llaves, resulta decisivo.

UNA FINCA DE PELÍCULA

La comunidad en la que vive Figuerola, que hace esquina entre las calles Isaac Albéniz y Tres Reis, no solo es noticia porque un consejero de distrito haya ocupado un piso, también porque sus inquilinos no pagan alquiler desde hace 27 años: llevan tres décadas sin contrato, sin pagar IBI, sin existir legalmente como inquilinos. Algo que solo se explica por la dejadez del dueño del edificio, el propio ayuntamiento, que lo expropió en 1989 para un plan de reordenación urbanística que nunca se llegó a llevar a cabo.

El propietario que había sido expropiado por el ayuntamiento se negó a revertir la operación cuando el plan urbanístico quedó suspendido y los inquilinos descubrieron con sorpresa que el señor que solía aparecer un domingo al mes para cobrar el alquiler dejó de visitarles. El consistorio hizo un intento de vender los pisos a los inquilinos, pero para entonces el precio de la vivienda ya estaba por las nubes y el precio requerido, 300.000 euros, resultó prohibitivo para los vecinos. Y fue pasando el tiempo, sin que nadie les volviera a reclamar el pago del alquiler. Ahora, el ayuntamiento está en proceso de volver a regularizar la relación proporcionando contratos de alquiler a los vecinos de la finca.

UNA DECISIÓN DE CiU

El grupo municipal de CiU se mostró cauteloso con el caso de Figuerola, y llamó a esperar a conocer los detalles del caso. El concejal Jordi Martí informó de que el consejero de distrito negó haber ocupado la vivienda. Con las alegaciones desestimadas, está por ver si el grupo mantiene a Figuerola como consejero de distrito o fuerza su destitución.

Nada más conocerse el caso, el gobierno de Ada Colau pidió a los convergentes que facilitaran la defenestración de su consejero de distrito. En una carta del primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, a Martí, el primero le pidió colaboración y le recordó que son los presidentes de los grupos municipales quienes proponen el nombramiento y el cese de los consejeros, y es la alcaldesa quien ante estas propuestas nombra o separa del cargo a los susodichos. “Por lo tanto, os agradeceríamos que estudiarais tomar las medidas oportunas para que la alcaldesa pueda actuar en consecuencia”, escribió Pisarello.

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