conflicto en el transporte público

El aumento de los servicios mínimos en el metro no impide una mañana de atascos

RAFAEL MORALES / BARCELONA

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El aumento de los servicios mínimos decretado por la Generalitat (con un 65% de los trenes en hora punta y un 45% el resto de la jornada) no impidió que los accesos a Barcelona volvieran a registrar atascos en la mañana de ayer a causa de la segunda jornada de huelga de los trabajadores del metro, coincidiendo con la celebración del Mobile World Congress. No obstante, a pesar de la gran afluencia de vehículos a primera hora del día, las colas fueron algo menores que el lunes, el primer día de movilizaciones. Las vías que registraron más problemas volvieron a ser las rondas de Dalt y Litoral. La primera llegó a sufrir retenciones a lo largo de todo su recorrido hasta las nueve de la mañana, mientras que en la Ronda Litoral, las caravanas alcanzaron una longitud de hasta 10 kilómetros.

La decisión de la Conselleria de Treball no gustó nada al sindicato CGT, que acusó a la Generalitat de "sabotear" la segunda jornada de protestas, con el “beneplácito” del Ayuntamiento de Barcelona. El lunes, los servicio mínimos fueron del 50% en hora punta y del 30% el resto del día. El Govern justificó el incremento por razones de seguridad, de movilidad y de contaminación atmosférica. Una argumentación que fue tachada de "burdas mentiras" por el sindicato, que acusó a la Administración de boicotear el "derecho fundamental a la huelga".

CAMBIO DE REGULACIÓN

Horas más tarde, la ‘consellera’ de Treball, Dolors Bassa, se mostró partidaria de "repasar" la regulación de los servicios mínimos que se establecen en caso de huelga, aunque siempre desde el diálogo y la concertación social y "nunca por la vía directa". La 'consellera' recordó que estos servicios están regulados por un acuerdo suscrito en el 2006 entre los agentes sociales y empresariales, y se mostró partidaria de actualizarlos aunque, en su opinión, estos procesos deben llevarse a cabo en momentos de "paz social" y no de conflicto laboral.

Aún así, Bassa defendió la decisión de la Generalitat después de los efectos para la movilidad que tuvo la huelga del lunes, pero, sobre todo, atendiendo al incremento de la contaminación atmosférica en toda el área metropolitana, informa Antoni Fuentes.

INCIDENCIA TÉCNICA Y PROTESTAS

Poco antes de las nueve de la mañana, una "incidencia técnica" en la línea 1 del metro provocó que durante un tiempo los convoyes no parasen en las estaciones en dirección a plaza Espanya y que los trenes se detuvieran más tiempo del habitual en cada estación de la línea.

TMB informó que la red de metro registró hasta las 9.30 horas un 20% menos de afluencia que un día normal. La cifra de usuarios fue, por tanto, superior a la del lunes, cuando durante la mañana se registró un descenso de pasajeros del 64%. Como es habitual en estos casos, la compañía cerró una veintena de accesos secundarios a las estaciones para evitar aglomeraciones.

A última hora de la tarde, un grupo de vecinos del barrio de La Marina, en la Zona Franca (que reclaman que se acabe el ramal del metro de la L-10) y miembros del colectivo Stop Pujades cortaron durante media hora los Ferrocarrils de la Generalitat en la estación Fira (donde está el recinto del Mobile) y la estación Europa-Fira de la L-9. Los manifestantes abandonaron la protesta tras la mediación de los Mossos.