AC/DC contra Judas Priest

Habituales del bar El Jardí de Ciutat Meridiana, con el futbolín tuneado en el que los jugadores son músicos heavies.

Habituales del bar El Jardí de Ciutat Meridiana, con el futbolín tuneado en el que los jugadores son músicos heavies.

RAMÓN
Vendrell

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Dolió ver a Bertín Osborne y Mariano Rajoy jugando al futbolín entre tacos mojigatos («me cago en la leche», «me cago en diez»). Para más inri era un modelo internacional, ese artefacto aberrante en el que los pies de los jugadores están fundidos en un yunque, lo que impide ejecutar la excelsa técnica del arrastre, el falsete del futbolín. Hay muchas más diferencias entre el internacional y el español, todas favorables al invento del gallego Alejandro Finisterre. La errónea elección de la mesa debería haberle costado unos cuantos votos a Rajoy. Un buen español no puede pasar estas cosas por alto. A lo que íbamos: dolió ver a Bertín y Rajoy, nada menos que Bertín y Rajoy, haciéndose los guais a costa de una cima de la cultura popular.

Pero el futbolín (español) tiene una credibilidad callejera a prueba de bomba.

En el bar El Jardí de Ciutat Meridiana hay uno emocionante. Juegan músicos de heavy morenos contra músicos de heavy rubios. La alineación morena es: DioBruce Dickinson (IronMaiden), Marilyn MansonGene Simmons (Kiss); Angus Young (AC/DC), Charly Glamour (Gigatron), King DiamondPancho (Bella Bestia), Blackie Lawless (Wasp), Fortu (Obús) y Lemmy Kilmister (Motörhead).

El 'once' rubio es: Cliff Burton (Metallica); Ozzy OsbourneKerry King (Slayer), Dave Mustaine (Megadeth); Vince Neil (Mötley Crüe), Dee Snider (Twisted Sister), Doro Pesch (Warlock); Wendy O. Williams (Plasmatics), Udo Dirkschneider (Accept), Rob Halford (Judas Priest) y Cronos (Venom).

La caracterización de los jugadores, notablemente detallista (Doro Pesch y Wendy O. Williams tienen tetas de silicona), es obra de Ignasi de la Fuente, más conocido como 'Tarzán'. De hecho los jugadores son suyos y los tiene cedidos al ingenio de El Jardí.

Con unos familiares ha adquirido un futbolín de la firma Billares Córdoba y lo están tuneando. De momento lo han pintado de negro y le han colocado embellecedores metálicos. Ahora trabajan en añadirle unas repisas en las que poder dejar con seguridad las cervezas. Y tienen la intención de incorporarle un mecanismo que dispare una ráfaga musical distintiva para los goles en cada portería.

CLUB INGLÉS

Una está clara: será un 'riff' de Judas Priest en honor a la canción de Gigatron 'El barco de colegas', en la que una tripulación heavy se enfrenta con «solos de los Judas» a una tripulación pija. «Pero los pijos nos vencieron / porque tienen la radiofórmula y el sistema», canta fatalista aunque orgulloso Charly Glamour. Cuando tenga instalados los muñecos que ahora están en el futbolín de El Jardí, será un aparato apoteósico.

El Jardí es el club inglés de Los Heavys de la Meri (de Ciutat Meridiana), un nutrido grupo de veteranos del metal de la década de 1980. Por allí paran los trillizos Serrano, 'los Trillis', antaño especialistas en colarse en conciertos y en asaltar bares de conciertos. Allí vibra el aire con ondas de épica periférica cuando se recuerdan idas («un metro lleno de heavies camino del Palacio de los Deportes, tío, ¿sabes qué es eso?») y regresos («a las seis de la madrugada salía de Tetuán el primer 62 hacia la 'Meri': un espectáculo») de actuaciones. Por allí corretean los hijos de Los Heavys de la Meri.

Que tienen emblema. Las calaveras están inspiradas en Forbidden. Las espadas, en Slayer. Y la tipografía, en Judas Priest. Recientemente Germán, el autor, le ha añadido un león y un casco de motocrós. El león recuerda la fuerza con que Dani, alias 'Tozzy'luchó contra el cáncer de páncreas que le mató. El casco recuerda a David, alias 'Samu' (de samurái), y a su pareja, Hayda, ahogados en una playa de Tarragona. Las tres muertes fueron el pasado verano. Para que sus hijos puedan tener Reyes, han entregado a la viuda de Dani los beneficios de las 550 participaciones que emitieron de la lotería de Navidad.

Los Heavys de la Meri, con De la Fuente como factótum, han creado  un Trivial Heavy Metal. El circuito del tablero, de vinilo, tiene forma de pentagrama o pentáculo. Las preguntas, cientos de tarjetas, titánica obra de artesanía informática, se dividen en las categorías heavy y glam, thrash metal y speed metal, death metal, black metal y punki, y mundo heavy metal. A esta corresponde la siguiente: «¿Cuál es la primera bebida mencionada en la canción 'Vamos muy bien', de Obús?». Calimocho.