SORPRESA EN LA COSTA

Delfines frente a la Barceloneta

Dos pescadores aficionados graban a un grupo de más de 40 cetáceos frente al hotel W

LAURA ESTIRADO / BARCELONA

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Que el Mediterráneo occidental no es una zona pobre en cetáceos ya se sabía, y que la mejor época para avistarlos es justo ahora, entre la primavera y los primeros días del verano, también. Sin embargo, a la mayoría de los mortales les sigue sorprendiendo toparse con un 'banco' de delfines a pocas millas de la costa de Barcelona.

Eso es lo que les pasó a dos pescadores aficionados una mañana de la semana pasada cuando salieron en busca de pescado azul, bacoretas, melvas, bonito...

Daniel Sánchez y Juan Pablo Mayoral partieron con la zodiac del puerto de Badalona sobre las once de la mañana. Y poco después, cuando se encontraban frente al hotel W, a unas cinco millas de la costa de la Barceloneta, un nutrido grupo de delfines se les arrimó a la barca para nadar con ellos. "Surfeaban, hacían piruetas y emitían sonidos", tal como habitualmente hacen con los ferris que enlazan Barcelona y Baleares, recuerdan. 

UN GRUPO DE MÁS DE 40 INDIVIDUOS

"Eran más de 40 ejemplares de delfines listados. Nadaban en grupo, las crías iban en el centro, delimitadas por los adultos", explican. "Al principio los seguimos manteniendo las distancias, pero al parar la embarcación vinieron a nuestro encuentro", detallan. Y así siguieron durante un largo rato, como se ve en los vídeos que grabaron.

Los cetáceos juguetones eran delfines listados  ('Stenella coeruleoalba', los más habituales en toda la costa de Barcelona, incluso en aguas poco profundas, según tienen censados los biólogos del Grup de Biodiversitat Marina, que ha constatado que estos animales acostumbran a nadar en grupos numerosos, a veces, incluso, de centenares de individuos.

Ambos pescadores ya se habían topado con delfines en aguas de Badalona, pero el banco que les seguió la semana pasada era mayor. "Si hay delfines, no ha pesca", aseguran, "pero la experiencia valió la pena".