EXPOSICIÓN. GRAFISMO DEL SIGLO XIX

La publicidad del pasado

El centro cívico Can Castelló exhibe una selección de 28 carteles modernistas de artistas como Santiago Rusiñol, Ramon Casas, Alphons Mucha y Toulouse-Lautrec.

Can Castelló. Castelló, 1. Horario: de lunes a viernes, de 10.30 a 20.30 horas. Entrada gratuita.

De izquierda a derecha, ilustraciones de Ramon Casas (1899), John Hassall (1894) y Santiago Rusiñol (1899).

De izquierda a derecha, ilustraciones de Ramon Casas (1899), John Hassall (1894) y Santiago Rusiñol (1899).

MIREIA MOYA / BARCELONA

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Las paredes del centro cívico Can Castelló, en Sarrià, evocarán hasta final de enero la herencia modernista de Catalunya y de parte de Europa con 28 reproducciones de famosos carteles publicitarios de la época. Se trata de una colección que refleja cómo era el arte que envolvía al cartelismo del momento, muy vinculado al mundo del espectáculo, sobre todo al teatro, la ópera, el baile y el cabaret. Un patrimonio cultural que, además, sirve para ilustrar cómo eran las nuevas técnicas propagandísticas que se empezaban a utilizar entre las últimas décadas del siglo XIX y durante los primeros años del XX, el mismo periodo que comprende la muestra.

Todas las piezas son un ejemplo de las tendencias estéticas que imperaban en el Art Noveau (conocido así en Europa) y en el modernismo, el nombre que recibió el movimiento en Catalunya, y son obra de consagrados artistas como Ramon Casas, Henri Toulouse-Lautrec, Jules Chéret, Alphons Mucha, Santiago Rusiñol, Adrià Gual, Adolphe Hohenstein, Leopoldo Metlicovitx, Antoni y Miquel Utrillo, Ernest Haskell y John Hassall, entre otros.

ORIGEN DE LA MUESTRA / El conjunto pertenece a los fondos del Institut del Teatre, donde se custodia un legado de hasta 5.500 unidades. Ahora, una pequeña parte de la colección ha sido cedida al espacio municipal durante el mes de enero (disponible hasta el día 29). El centro cívico carece de sala de exposiciones, así que todos sus rincones se han llenado de la magia propagandística decimonónica, como el recibidor, el distribuidor del primer piso y los pasillos.

La oferta cultural del centro se renueva cada tres semanas, siempre con propuestas de lo más variadas. En este caso, además, el tema coincide con los orígenes del lugar, pues se trata de una antigua masía que hace más de 200 años se remodeló al estilo modernista. Unos vestigios de los que hoy en día solo se conserva la sala noble, el antiguo comedor.