Las perspectivas económicas de un sector clave en la ciudad

Un 'reality' promociona BCN ante más de 200 millones de chinos

ADRIÁN FONCILLAS
PEKÍN

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En las aventuras televisadas de un puñado de celebridades chinas confía Barcelona para engordar aún más sus ya rechonchas cifras de turismo. Es una campaña publicitaria sin precedentes. El reality show Divas en la carretera ha sido el programa más visto en horario de máxima audiencia en China durante varias semanas. La propuesta consistía en privar a siete grandes estrellas de la televisión y la música de sus lujos cotidianos y darles 120 euros diarios para perderse por ciudades italianas y españolas. Tuvo su gracia para el público chino ver en hostales y aerolíneas de bajo coste, por ejemplo, a Feier Li, una actriz veinteañera que en su país natal lleva desde luego otro ritmo de vida. El miércoles, en una recepción en la Embajada española de Pekín, celebrada como colofón del programa, eligió un vestido blanco para que combinara mejor con la carrocería del Rolls Royce del que descendió.

Para Barcelona, quién sabe si puede haber un antes y un después de Divas en la carretera. Los capítulos (de más de 100 minutos y de los cuales uno y medio pasan en Barcelona) han sido vistos por una media de 200 millones de telespectadores, con puntas de más de 300. La audiencia se corresponde con la inversión que llevó a cabo la cadena televisiva de la provincia de Hunan, líder en China en entretenimiento, pues desplazó a 90 personas para el rodaje.

«Es un golpe de suerte que te pasa una vez en la vida. No dudamos en subirnos al tren y volcarnos en el programa. Ha sido un éxito inverosímil y, además, con coste cero. Para un país o una ciudad sería inasumible. No hemos hecho cuentas porque nos hubiéramos quedado bizcos», explica entusiasmado el embajador español en China, Manuel Valencia Alonso. Desde la embajada y la Agencia Catalana de Turismo auguran efectos inmediatos de esta millonaria promoción en audiencia de España como destino. «Los fans del programa buscarán los lugares donde las estrellas se fotografiaron, como la Sagrada Família o la Casa Batlló», opina Antonio Li, director del Centro de Promoción Turística. La productora ya ha recibido preguntas acerca de los restaurantes y hoteles mostrados.

Una empresaria de Pekín que ya organiza desde hace tiempo viajes de turistas chinos a España coincide también en afirmar que cara al futuro indudablemente el reality show reportará beneficios para Barcelona, aunque en su caso le pone un pero: duda de que ese turismo de bajo coste mostrado en el programa sea el idóneo. Es un punto de vista interesante, porque para los grandes destinos del mundo, China es, sobre todo, un enorme yacimiento por explotar y mimar, no exactamente por el volumen de su población, unos 1.300 millones de personas, la mayoría de las cuales jamás viajarán al extranjero, sino porque allí los ricos se cuentan por millones. Se calcula que en China hay más millonarios que población total en España.

La embajada confía en que la puntilla de Divas en la carretera sea la Semana de Diseño que se celebrará en Pekín el próximo septiembre. Esta edición está dedicada a Barcelona. «A esa cita van jóvenes que buscan hoteles de diseño y viajan en business. Si una ciudad va a tener que hacer hueco para los chinos, esa es Barcelona», pronostica el embajador.

Por el momento, el peso del turismo chino en Barcelona es aún muy modesto. Según el gremio hotelero de la ciudad, unos 74.000 chinos pernoctaron en Barcelona el pasado año. Las cifras permiten lecturas opuestas. La tendencia es alcista y Barcelona es la ciudad española más conocida en China. Esa es la buena noticia. La mala es que  los números palidecen ante otras capitales como París. El desarrollo está lastrado por la falta de promoción y de vuelos directos, que sí existen con Madrid.

El reality es un empujón inesperado. Europa es un confuso magma de países para muchos chinos del que apenas emerge Francia como epítome de lujo y elegancia. El conocimiento de España, Catalunya o Barcelona no va más allá del tópico.. «Elegimos España porque es un país misterioso y lleno de pasión. Los chinos sabían de Gaudí en abstracto, pero ahora ya han visto sus obras en la tele», explica Xia Qing, subdirectora de Hunan TV. «Solo conocía la Sagrada Família», admite Peipei Zheng, actriz de reaparto en la conocida Tigre y Dragón de Ang Lee. Es la más cosmopolita de las concursantes de Divas en la carretera y la única que habla inglés.

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resumen de 'Divas en la carretera' en Barcelona