Robo de guante blanco en una lujosa joyería

Fue una acción de guante blanco. Sin butrones, ni alunizajes, ni escaparates rotos. Los autores del robo que el pasado sábado de madrugada sufrió la lujosa joyería Chopard de Barcelona actuaron de forma sibilina, sin más destrozos que el dejado en la caja fuerte que lograron forzar y la rotura de la cerradura de la puerta del taller donde el prestigioso establecimiento repara las joyas.

Se trató de un golpe minuciosamente calculado, pues los ladrones, en lugar de asaltar la joyería, situada en el paseo de Gracia, se concentraron en preparar el robo al taller que esa firma tiene en un piso situado en la sexta planta de un edificio cercano, situado también en esa vía.

Según fuentes cercanas a la investigación, el robo se produjo alrededor de la 1 de la madrugada del sábado. Unos ladrones lograron entrar en el taller y, una vez dentro, forzaron la más pequeña de las cinco cajas fuertes donde la firma guarda las joyas y los relojes de lujo que han de ser reparados. Según explicaron esas fuentes, en el momento del robo, en el conjunto de esas cinco cajas podía haber entre cuatro y cinco millones de euros en objetos de valor. No obstante, no precisaron el valor concreto de los objetos que había en la caja que fue forzada por los asaltantes.

GRUPO PROFESIONAL / Contactadas por este diario, fuentes cercanas a esa marca de joyería confirmaron la entrada de los ladrones en el taller pero desmintieron que se hubiera forzado o sustraído ninguna caja fuerte, sino que los ladrones solo se llevaron objetos que estaban siendo reparados.

El hecho de que el robo se perpetrara en el taller en lugar de en la tienda lleva a los investigadores a sostener que los asaltantes eran un grupo de ladrones profesionales que estuvieron vigilando el establecimiento comercial hasta lograr ubicar el lugar donde se realizan esas reparaciones y que suele estar protegido por menos medidas de seguridad que la del establecimiento.

DESCUBIERTO A MEDIODÍA / Además, sorprende el hecho de que, pese a que la alarma sonó cuando se forzó la puerta, nadie de la empresa de seguridad contratada acudiera, sobre todo teniendo en cuenta que en aquella vivienda había objetos de valor cuantificados en cientos de miles de euros.

La razón es que desde la empresa de seguridad se señaló que la alarma podía haber saltado de forma automática o por error. De hecho, pese a que la alarma saltó a la 1 de la madrugada, el aviso a los mossos no llegó hasta el mediodía del sábado que fue cuando los responsables de la joyería llegaron al taller, que también hace las funciones de oficina.

Chopard es una marca suiza de alta joyería cuya sede principal está en Ginebra y que, entre otras cosas, es famosa por ser la encargada de fabricar la Palma de Oro, el premio del festival de cine de Cannes. De hecho, en mayo pasado, la delegación de esa joyería que se instala siempre en esa ciudad con motivo del festival cinematográfico sufrió un robo de joyas por valor de más de un millón de euros.