El 70% de patologías laborales en BCN son por ansiedad y depresión

La situación económica suele influir de forma determinante en la salud de los ciudadanos, y así está sucediendo ahora a medida que la crisis penetra en la estructura social de los barceloneses. Dos de cada tres personas que solicitaron ayuda médica en su lugar de trabajo el año pasado en Barcelona, un 70% del total, sufrían un trastorno ansioso depresivo, circunstancia que afectó en mucha mayor medida a las mujeres que a los hombres. Así lo indica el informe de la salud de Barcelona del 2010, que fue presentado ayer por Cristina Iniesta, presidenta de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB). Aunque el documento no alude a la salud mental de quienes han perdido su trabajo, sí constata un incremento del 8% en la demanda de asistencia psicológica entre los menores de 18 años, y de un 5% en la población adulta.

Aun así, será dentro de unos años cuando se podrá constatar estadísticamente el empeoramiento en el resto de parámetros de salud inducido por el actual deterioro económico, advirtió Carme Borrell, epidemióloga de la ASPB. «Es evidente que la pobreza influye negativamente en la salud», reiteró Borrell.

Aumenta la demanda de ayuda social en los centros que ofrecen ese tipo de apoyo en Barcelona, indica el informe. En el 2010 solicitaron recursos sociales 61.300 ciudadanos, un 36% más que en el 2007. En enero del 2010, un 73% de los barceloneses en situación de paro percibían un subsidio, dato que se había reducído al 66% en diciembre.

Un 21% de la población de Barcelona son personas nacidas en el extranjero, un sector en descenso. En el último año, se redujo un 7,4% el censo de extranjeros de 14 a 44 años. Crece el segmento de los mayores de 75 años, en especial el de los que viven solos. Un 43% de las mujeres mayores de 85 años (16.000 personas), y un 22% de los hombres de esas edades (3.191 individuos), viven solos. Son la población más necesitada de ayuda social.

FALLECIMIENTOS / El infarto de miocardio encabeza las cinco primeras causas de muerte entre los hombres, seguido del cáncer de pulmón (vinculado al tabaco), la bronquitis, el ictus cerebral y el cáncer de colon. El ictus o trombosis cerebral es la primera causa de muerte en las mujeres de todas las edades, seguida del infarto de miocardio, las demencias y el alzheimer, y la insuficiencia cardiaca. Entre las menores de 40 años, no obstante, el cáncer de mama es la segunda causa de muerte.

La sífilis, la gonococia y el linfogranuloma venéreo, enfermedades de declaración obligatoria por parte de los médicos, siguen aumentando de forma signficativa en Barcelona, fundamentalmente, entre los hombres homosexuales. Estas enfermedades, que llegaron a desaparecer a principios de los años 90 coincidiendo con la irrupción del sida, mantienen un claro avance desde hace 10 años, crecimiento que se atribuye a la ausencia de prevención infecciosa al mantener relaciones sexuales. Los médicos reiteran la conveniencia de usar preservativo al mantener relaciones con varias parejas. También siguen creciendo, y por la misma causa, la infección del virus de inmuniodeficiencia humana (VIH), que causa el sida. Un 48% de los afectados es consciente del contagio tras varios años de infección.