La candidatura para el 2022

ICV-EUiA redobla su oposición a las esperanzas olímpicas de Hereu

XABIER BARRENA
BARCELONA

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Los socios del PSC en el gobierno en minoría de Barcelona, los ecosocialistas de ICV-EUiA, mantienen su ofensiva de distanciamiento. Si el viernes fue el actual líder municipal de la formación, Ricard Gomà, quien dejó claro que su fuerza no secunda, ahora, los planteamiento del alcalde, Jordi Hereu, sobre la candidatura olímpica del 2022, ayer fue la expresidenta del grupo municipal, Imma Mayol, quien volvió a rea-

brir la herida en el seno del bipartito. Al hilo de lo que publicó ayer EL PERIÓDICO, acerca de los planes originales del alcalde, que pasaban por competir por albergar unos Juegos de verano, la hoy quinta teniente de alcalde espetó que la coalición rojiverde tampoco hubiese apoyado una candidatura estival.

En unas declaraciones a Europa Press, Mayol no se acogió, como en el caso de los Juegos de invierno, a cuestiones de sostenibilidad y medioambiente para explicar sunoa esos eventuales Juegos de verano, sino que apeló a la raíz misma de las críticas que se vertieron tras el Fòrum: la capital catalana no puede crecer a «golpe de evento». Dejando lo que pudo haber sido y no fue por lo que de momento es, Mayol afirmó que desde su coalición aún apoyan menos la candidatura de invierno, ya que subrayó que Barcelona es una ciudad mediterránea y, en plena crisis, hay otras prioridades.

Fuentes del PSC señalaron a este diario que no prevén poner coto a la díscola actitud de sus socios de gobierno. «Tienen un candidato poco conocido y buscan notoriedad», señaló esta fuente. Sobre la candidatura, la misma voz apuntó que cuenta con el apoyo de cuatro de las cinco fuerzas. Destacó este responsable municipal, el papel del PP, quien en una actitud «franca y honesta» se ha ofrecido a Hereu para lo que pudiera necesitar sin cejar en sus críticas.

NEGACIÓN DE HEREU / En San Sebastián, el alcalde Jordi Hereu aseguró que «nunca» ha planteado la hipótesis de celebrar unos nuevos Juegos de verano en el 2020 en Barcelona ni ha hablado de ello con el Comité Olímpico Español (COE). «En ningún caso –se extendió el alcalde–, ha habido intención porque ya los hemos organizado».

La oposición, por su parte, arremetió contra el alcalde por entender que el cambio de planes supone poco menos que ir dando bandazos. El portavoz de CiU en el ayuntamiento, Joaquim Forn, señaló que «se demuestra una vez más que el Gobierno municipal no tiene las ideas claras y que Hereu se limita a sacar conejos de la chistera». En este punto, Forn amplió las críticas a la propia decisión de optar por los Juegos invernales y recordó que «las dos principales medidas del mandato, la reforma de la Diagonal y la candidatura olímpica, no se hallan en el programa de actuación municipal para este mandato», lo que deja a las claras «la imprevisión» del alcalde.

El popular Alberto Fernández Diaz ironizó sobre la división en el seno del bipartito y afirmó que «si Hereu es incapaz de cohesionar a su Gobierno municipal, más difícil será convencer a los miembros del COE y el COI» de las bondades de la candidatura olímpica barcelonesa.

LA RECETA ERRÓNEA / Finalmente, también el republicano Jordi Portabella vio en la información adelantada por este diario la constatación de que la receta del PSC para salir adelante en esta difícil coyuntura económica es la misma que se empleó en los años 80, es decir, la opción olímpica. Y según Portabella, nuevos tiempos requieren nuevas alternativas.